Jamie Foxx, actor hollywoodense conocido por su interpretación de Ray Charles en la película biográfica Ray del 2004, por la que ganó un Premio Óscar, un Globo de Oro, un BAFTA y un Premio del Sindicato de Actores, se volvió noticia en las últimas horas luego de que se conociera una denuncia por abuso sexual en su contra.
Según reveló la documentación compartida por TMZ, la agresión habría ocurrido en 2015 en el restaurante Catch NYC de Nueva York, mientras el actor estaba tomando y comiendo algo. Una fan se acercó a pedirle una selfie y el actor habría abusado de ella.
En el testimonio de la víctima, quien no quiso revelar su identidad, relata que vio a Jamie Foxx junto a otra persona “a una mesa de distancia” de donde estaba. La joven estaba con una amiga, se acercó al actor para pedirle una fotografía, a lo que respondió: “Claro, cariño, cualquier cosa por vos”.
Luego de sacarse varias fotos, el actor comenzó a hacer comentarios subidos de tono sobre la mujer: “Vaya, tenés un cuerpo de supermodelo” y “hueles muy bien”, habría dicho. Acto seguido, la tomó del brazo y la llevó a la parte trasera del restaurante.
Allí, el actor “puso las dos manos en su cintura, las movió debajo de su top y comenzó a tocar sus senos”, describió el abogado de la víctima. La mujer quiso alejarse y llamar a un guardia de seguridad cercano, pero este al ver lo que ocurría se alejó. En ese momento, el ganador del Oscar habría deslizado sus manos por el pantalón de la víctima y tocado sus genitales. Se detuvo cuando vio que llegaba la amiga de aquella.
Los daños que sufrió la víctima
El informe presentado ante la justicia aseguró que: “La víctima resultó herida, quedó enferma, dolorida y discapacitada. Se la obligó a someterse a un tratamiento y a un asesoramiento médico permanente. No pudo realizar más sus actividades habituales y padeció un gran dolor: se verá afectada permanentemente por las lesiones y la angustia emocional que tuvo como resultado de la agresión sexual y el abuso”.
En la denuncia se hace énfasis en que Foxx cometió un “hecho atroz”, amparado en que “es una celebridad muy conocida” y que “su víctima sufrió lesiones físicas, emocionales, de ansiedad, angustia y daños económicos”.