En el Servicio Penitenciario de San Juan hay conmoción por la detención de un guardiacárcel de 25 años. De acuerdo a la publicación de Tiempo de San Juan, el joven fue apresado este último jueves en el propio edificio en el que trabaja por el presunto abuso sexual de su beba de dos años y también por agredir y amenazar a su expareja. El caso es investigado por el juez Martín Heredia Zaldo, del Cuarto Juzgado de Instrucción.
Según consta en el informe policial, el sujeto (no se publica su identidad para resguardar a las presuntas víctimas) fue denunciado el día martes por parte de sus ex esposa y madre de su hija, con quien convivió durante 7 años y se separó hace menos de un mes. La mujer afirmó que padeció golpes, insultos y violencia psicológica por parte del penitenciario. Pero lo más grave es que en su denuncia contó que su hija sufrió ultrajes a manos de su padre -mediante manoseos- en las últimas semanas. Frente a los policías señaló que no lo acusó antes porque estaba amenazada y tenía miedo.
Con la denuncia radicada el juez Heredia Zaldo ordenó inmediatamente la detención del guardiacárcel. La misma se hizo efectiva dos días después en los pasillos del Penal de Chimbas, es decir en su lugar de trabajo, ya que al allanar su casa no se lo encontró. Tras esposarlo se le secuestró el arma reglamentaria, con la que habría agredido y amenazado a su ex.
El diario local contó que el detenido es nuevo en la fuerza y tiene el cargo de Subyugante –como un agente- dentro de la cárcel sanjuanina. Allí cumplía funciones de seguridad en el Sector I del edificio. Acusado de abuso sexual y violencia física y verbal, seguirá detenido mientras se investigue y resuelva el caso.