El pasado martes se conoció que la oposición y el oficialismo avanzan en un acuerdo para postergar un mes las elecciones legislativas de este año. Las PASO no serían en agosto sino en septiembre y las generales no se harían en octubre sino en noviembre.
Ese es el principio de acuerdo sobre el cual el oficialismo y la oposición decidieron avanzar en el Congreso. El cónclave fue en la Casa Rosada. El anfitrión, el ministro del Interior, Eduardo “Wado” de Pedro.
Tras conocerse la noticia en los medios, el intendente Macri y el presidente de la UCR, Alfredo Cornejo, salieron a desmentir que hubiera tal acuerdo. Pero en el Gobierno y en la oposición sostienen que el acuerdo está. Al parecer, el motivo de la reacción de Cornejo y Jorge Macri fue el enojo de radicales bonaerenses, por no haber participado de la cumbre.
A estas voces disidentes se sumó la del senador nacional por Salta, Juan Carlos Romero, quien manifestó que “la pandemia no puede ser excusa para postergar las elecciones”, ya que durante 2020 se realizaron elecciones en todo el mundo.
En línea con lo expresado por Macri y Cornejo, Romero considera que para alterar el cronograma legislativo “e requiere una ley con mayorías especiales en el Congreso de la Nación y no de un contubernio”.