Luis Rubio, el actor rosarino que conquistó a varias generaciones con su entrañable personaje “Eber Ludueña”, decidió dar un giro en su vida personal y profesional. Aunque no se alejó de las luces del espectáculo y los sets de grabación, el humorista apostó por un emprendimiento familiar en el corazón de Catamarca, más precisamente en Tinogasta, donde cultiva vides y olivos.

Según reveló en una entrevista con Bichos de Campo, el actor está llevando adelante un proyecto agrícola que combina su pasión por la naturaleza, la producción sustentable y el trabajo colectivo. “Nos decidimos y compramos, en plena pandemia, una finca de 6 hectáreas y unos 70 años de antigüedad, ubicada en Villa San Roque, departamento de Tinogasta. Es un lugar impresionante, junto a un canal de riego y rodeado de cerros”, explicó.

“Con mi mujer estamos felices de haber emprendido algo que nos entretiene, nos gratifica y nos permite seguir aprendiendo”, expresó el rosarino sobre el proyecto que incluye la plantación de diversas cepas de uva para vinificación, como Torrontés, Bonarda, Syrah y Malbec, así como también variedades de olivo para la producción de aceite de oliva, como Arauco, Arbequina y Manzanilla.
Rubio destacó que su emprendimiento tiene un fuerte compromiso con la producción orgánica y con generar un vínculo emocional con la tierra.

El actor confesó que encontró en la actividad rural una forma de reconectar con valores simples y genuinos. El proyecto avanza con proyección aunque por el momento solo “abastecemos a algunos comercios amigos en Rosario, San Pedro y Buenos Aires, porque nuestra producción todavía es pequeña”.
De Eber Ludueña a viticultor apasionado, Luis Rubio demuestra que nunca es tarde para reinventarse. Con humor, compromiso y amor por la tierra, el artista rosarino se sumerge en una nueva etapa de su vida que combina campo, familia y sueños a flor de piel.