Después de dos meses de investigación por parte de la Justicia provincial, este lunes quedó bajo prisión preventiva el primer imputado por un asesinato mafioso en Rosario ligado al tráfico de drogas. Si bien aún resta dar con los autores materiales, la Fiscalía identificó en esta instancia al hombre que facilitó la emboscada de un socio de Esteban Lindor Alvarado, señalado como el jefe de la principal banda narco de la provincia.
El crimen de Rodrigo Carlos Sánchez (44) ocurrió en las últimas horas previas al decreto de aislamiento social, preventivo y obligatorio por la pandemia del nuevo coronavirus. Sin embargo, los encargados de la causa plantearon en esta nueva instancia que el plan empezó a cocinarse cuatro días antes, cuando el acusado robó un remís tras pedir un viaje desde la zona sur hasta Magaldi al 9800, en el extremo oeste de la ciudad.
Los fiscales Matías Edery y Luis Schiappa Pietra señalaron a Héctor Brezik como la persona que sustrajo el coche empuñando un revólver después de hacerse pasar por un cliente en San Martín al 3800. Bajo amenazas obligó al conductor a bajarse y también le sacó su celular. El auto estuvo escondido desde el lunes 15 de marzo hasta el jueves siguiente, cuando dos personas lo utilizaron para interceptar a Sánchez cerca del Jockey Club de Rosario.
El Ministerio Público de la Acusación (MPA) consideró que el hombre de 38 años fue partícipe primario del asesinato cometido a media mañana en Wilde y San Lorenzo, donde Sánchez murió a bordo de su pick up Toyota Hilux luego de ser acribillado. Si bien no lo ubican en la escena del crimen, argumentan que facilitó el vehículo utilizado por los tiradores. El mismo fue hallado poco después en una zona cercana y presumen que continuaron la huida desde Magaldi y Ezeiza a bordo de otro rodado.