El ministro de Economía, Infraestructura y Energía de Mendoza, Martín Kerchner, presentó un "Plan de Mejora a la Competitividad Frutícola 2018/19" que pretende transformar montes frutales de baja productividad y alto costo a otras variedades con mayor potencial de mercado y, al mismo tiempo, aplicar mejoras tecnológicas en más de 10.000 hectáreas cultivadas.
Se trata de líneas de crédito a tasa cero a siete años, con tres de gracia, informó Kerchner desde San Rafael en su cuenta de Twitter.
Desde la cartera informaron que luego del éxito del plan de reconversión vitivinícola, el Gobierno impulsa el Programa de Mejora Competitiva (PMG) para frutales, mediante proyectos asociativos y con créditos blandos con hasta cuatro años de plazo para su devolución, destinado a productores de durazno, ciruela, manzana, pera, damasco, membrillo y almendras, cuya actividad principal sea la agrícola o agroindustrial.
"Con el PMG buscamos transformar el problema de fondo respecto de la competitividad del sector frutícola. Venimos de un año de súper cosecha que, en algunos casos, causó una crisis más que una alegría. Por ejemplo, en ciruela, tuvimos una cosecha récord de 151 millones de kilos, una de las más altas desde 2008", explico Kerchner.
"La realidad -agregó- es que ese nivel de competitividad es muy bajo, producto de muchos factores que hemos empezado a atacar mientras ponemos a disposición herramientas para pequeños y medianos productores".