Carlos Goncharuk estuvo ocho años preso por dejar ciega a golpes a su mujer en 2011 y durante ese tiempo nunca aceptó hacer el tratamiento contra la violencia de género que le había impuesto la Justicia.
El hombre agotó la pena de prisión a la que fue condenado y este jueves el Tribunal de Casación Penal bonaerense ordenó su inmediata liberación a pesar de no haber cumplido con el tratamiento.
Días atrás, el juez platense José Villafañe había resuelto que Goncharuk no fuera liberado hasta tanto cumpliera con el requisito pendiente, pero un recurso de amparo presentado por la defensa fue avalado por Casación y el hombre podrá salir de la cárcel.
Darío Witt, el abogado de Susana Gómez y fundador del refugio para mujeres víctimas de violencia “Casa María Pueblo”, dijo a Télam que "es terrible que nuevamente la justicia ponga en riesgo la vida de Susana".
El letrado también remarcó que “liberar a Goncharuk sin que haya cumplido con una parte clave de su sentencia ratifica que a la justicia no le interesa proteger a las víctimas”. Y agregó: “Como si el tiempo hubiera vuelto atrás, ella respira miedo otra vez y quiere regresar al refugio para protegerse”.
A pesar de su liberación, el exrecluso no podrá acercarse a menos de 100 kilómetros a su exmujer, su familia y a la escuela de los cuatro hijos que tienen en común.
Además, deberá colocarse una pulsera electrónica para que puedan controlar si cumple con la perimetral.