Cuando cada vez falta menos para definir quiénes serán los finalistas de MasterChef, las pruebas semanales se vuelven más complicadas con el correr de los episodios y los participantes deben demostrar toda su destreza. En la cuenta regresiva de la competencia, los aspirantes ya no pueden cometer errores.
Se viven noches de mucha presión y tensión en las cocinas más famosas del país y la competitividad se apodera del estudio. Así quedó demostrado durante uno de sus desafíos cuando Antonio López y Estefanía Herlein quedaron enfrentados y debieron desempatar para definir quién subiría al balcón.
A lo largo de la semana, ambos participantes habían obtenido igual cantidad de estrellas, pero solo uno se salvaría de la gala de eliminación. Por lo cual compitieron en un mano a mano en el ciclo conducido por Wanda Nara.
Les tocó realizar un plato bien de bodegón: revuelto de gramajo. Los jueces Germán Martitegui, Donato de Santis y Damián Betular les dieron solo 12 minutos para la elaboración del plato.
El momento en que Antonio por poco prende fuego las cocinas de MasterChef
Durante la prueba, Antonio y Estefanía cocinaron a toda velocidad para poder llegar con el tiempo y presentar una receta que los salve de la eliminación. Sin embargo, en el apuro, el joven oriundo de Salta cometió un descuido y casi prende fuego las cocinas.
Lo cierto es que durante la cocción, el estudiante de enfermería volcó un poco de aceite sobre la hornalla y al entrar en contacto con el calor, rápidamente combustionó y provocó una gran llamarada que fue captada por la cámara. Afortunadamente, el joven de 19 años se dio cuenta y logró controlar la situación.
Pese a que su plato cumplía con la consigna, los sabores y la ejecución no alcanzaron para subir al balcón y los jueces eligieron la preparación de Estefanía, quien se garantizó una semana más dentro del certamen.
