San Valentín está cada vez más cerca y surge la disyuntiva de a dónde ir a celebrar este día tan especial. El clima de verano y soleado te invita a alejarte de la caótica Ciudad de Buenos Aires y adentrarse en medio de la naturaleza, a disfrutar de un rico plato de ensaladas, de una milanesa o lo que más te guste, en un jardín oculto y además, disfrutar de una excepcional muestra de arte.
En este día tan especial que se festeja el amor, no te podes perder estos cuatro lugares para ir a pasear junto a la persona más querida.
Los cinco lugares ideales para celebrar el Día de los Enamorados
- Los Jardines de Las Barquin
Oculto en el Museo de Arte Hispanoamericano Fernández Blanco, en Retiro, se encuentra uno de los jardines más especiales de la Capital porteña. Ubicado en Suipacha 1422, el restaurante se encuentra rodeado entre enredaderas, plantas y una hermosa fuente en medio del predio.
Como menú de todo el día presenta distintos tipos de tostadas, con shakshuka, huevos y tomate; con hummus de alubias, hongos, kale, gremolata y huevo; y jamón y queso. También ofrece yogurt con granola y fruta, croissant relleno con palta, queso brie, rúcula y pickles de cebolla, medialuna de jamón y queso, y una tabla de quesos.
En entradas, encontras empanada de centeno; tomates reliquia, con frutilla, cebolla morada, espinaca y almendras; y faina. Mientras que de principales, hay milanesa de cerdo, hamburguesa de lenteja, risotto verde de cebada, y el plato y la pasta del día.
- Museo Nacional de Arte Decorativo
En el Museo Nacional de Arte Decorativo, en Recoleta, se encuentra el restaurante perfecto para que conectes con la naturaleza y sientas un aire parisino. Ubicado sobre la esquina de la avenida Libertador al 1900, con una imponente arquitectura francesa te invita a que disfrutes de la espectacular arquitectura de principios del siglo XX y que luego, des un paseo por el museo.
El museo tiene entrada gratuita y presenta una colección permanente que incluye obras de arte de Rodin, Antoine Bourdelle, El Greco, Vernet. También expone muebles de época, estatuas, fuentes, esculturas y caminos empedrados.
El menú del restaurante que se encuentra en el palacio es amplio para todos los gustos, desde sus ensaladas con salmón, langostinos, pollo, hasta para los vegetarianos, con peras caramelizadas y rúcula. También hay distintos tipos de carnes, como la pechuga rellena de espinaca o de pollo y la bondiola teriyaki. Hay crepes de pollo y calabaza y muzzarella y tartas de jamón y queso, calabaza y espinaca y cebollas caramelizadas.
En la parte de cafetería, podes disfrutar de una pastelería de primera calidad con budines de limón, brownies, alfajores de manteca o de coco, scons con manteca y dulce, y acompañarlo con un café, submarino, o un té.
- Museo Evita Restaurante
En el Museo Evita, en Palermo, se encuentra una galería rodeada de naturaleza inigualable para disfrutar del día. Ubicada en Lafinur 2988, se encuentra una casona construida a principios del siglo XX en honor a Eva Perón. Esta obra combina elementos del renacimiento español e italiano en un desarrollo de tres niveles y una torre.
Como principal hay empanadas de carne con dip de tomates y albahaca, aros de calamar, mollejas a la provenzal, a su vez, encontramos ensaladas caeser, de pollo grillado y de hojas verdes. También hay sandwiches en pan casero, y pastas, como ñoquis de remolacha, sorrentinos de ricota y tagliatelle.
De postre se destaca el crepe de dulce de leche, el tiramisú de lima, la torta de manzanas, el cheesecake de maracuyá, y el flan casero. Como cafetería, podes disfrutar de un yogurt con fruta, de huevos revueltos y hasta tortas, como la chocotorta, la carrot cake y el mini rogel. Se puede acompañar con un capuchino, un té zin o café con leche.
- Museo de Arte Español Enrique Larreta
Por último, en el Museo de Arte Español Enrique Larreta, en Belgrano, se esconde un jardín único para relajarse en medio de la naturaleza. Ubicado en Juramento 2291, se encuentra una casa estilo colonial con un patio andaluz digno de ser visitado.
El museo posee una colección de obras que abarcan desde el Medioevo hasta principios del siglo XX, mientras que el jardín es uno de los principales atractivos. Fue diseñado según la tradición hispano-islámica, como un lugar para la meditación. Está decorado con cerámicas granadinas cuadradas, blancas y azules, con baldosas color ladrillo.
En medio de este oasis, se encuentra el restaurante de inspiración francesa, Croque Madame, para poder relajarse. Entre su menú encontramos croques de pollo y de salmón ahumado, sorrentinos de calabaza, ravioles de pollo, de salmón y gnocchis. También hay sandwiches de pollo con palta, de jamón y queso, y de salmón ahumado.
Como postre, encontramos los famosos panqueques de dulce de leche, mousse de lima y de maracuyá, volcán de chocolate y de dulce de leche y brownie con helado. En la parte de cafetería también encontramos tortas como la rogel, el crumble de manzana y la carrot cake.