Las víctimas tienen 11, 10 y 8 años. Y según declararon en Cámara Gesell, su padre biológico las sometía durante el régimen de visitas a sus dos hijas mientras obligaba al varón a observar.
La denuncia que hizo la mujer tuvo trascendencia pública en vísperas de la Navidad del año pasado. Esa tarde acudió a la comisaría Primera de Eldorado para acusar al uniformado de abuso sexual en perjuicio directo de sus dos hijas más grandes -durante alrededor de un año y medio- aunque un varón era obligado a mirar lo que el progenitor hacía con las nenas.
Tras escuchar el testimonio de los menores en Cámara Gesell y el resultado de otras diligencias, alrededor de cuatro meses después (en abril de este año) la titular del Juzgado de Instrucción Dos de Eldorado, Nuria Allou, resolvió firmar la prisión preventiva para el efectivo bajo los cargos de "abuso sexual simple calificado por el vínculo" en el caso de las nenas y "corrupción de menores agravado en concurso ideal" por el niño.
Los estudios médicos determinaron que no hubo acceso carnal, pero en base a los exámenes y declaraciones la magistrada concluyó que los niños fueron objeto de ultraje sexual. El acusado, que gozaba de los beneficios de estar alojado en una dependencia policial rodeado de conocidos, fue trasladado a la Unidad Penal III y deberá esperar el avance del proceso tras las rejas.
Fuente: El Territorio