A tres semanas de la desaparición de Lian Flores en Ballesteros Sud, Córdoba, la incertidumbre y el dolor siguen marcando a su familia. El niño, de solo tres años, fue visto por última vez el 22 de febrero mientras jugaba en el patio de su casa. Desde entonces, no hay rastros de su paradero, y la desesperación crece con el paso de los días.
En medio del dolor y la incertidumbre, su padre, Elías Flores, rompió el silencio y expresó su angustia en una entrevista con Telenoche de El Doce TV. Allí, reafirmó su principal sospecha sobre la desaparición de su hijo: “El pensamiento que tenemos es que alguien se lo llevó. Lo pensamos desde el principio, pero no sabemos quién”.
Desde el momento en que se denunció su desaparición, más de 300 personas participaron en operativos de búsqueda en distintas zonas rurales y urbanas cercanas a su hogar. Sin embargo, hasta ahora, los resultados han sido infructuosos.
Lian todavía no aparece: un pedido desesperado
La angustia de la familia Flores aumenta con el paso de los días. En su testimonio, Elías dirigió un conmovedor mensaje a quien pudiera estar con su hijo: “Lo único que le pido a la gente que lo tenga es que se ponga la mano en el pecho, en su corazón, y se ponga en mi lugar. Nosotros estamos llevando este dolor, y me devuelvan al niño”.
El padre insiste en la teoría de que su hijo fue secuestrado y mantiene la esperanza de recuperarlo sano y salvo. “Esa mentalidad tenemos. Está vivo mi hijo, con eso mantenemos el ánimo. Tenemos fe y pensamos que está con vida”, aseguró con convicción.
La desaparición de Lian ha sumido a la familia en una angustia incesante. Según relató su padre, la tristeza es permanente: “Siempre estamos llorando y en cualquier momento nos acordamos y lloramos. Uno empieza a llorar y todos lloramos por él”.
Su esposa, en particular, está profundamente afectada. “Mi señora está siempre llorando, ella es la más delicada con todo esto y está sufriendo”, confesó Elías con la voz entrecortada.
El peso de la culpa
En medio del dolor, el padre de Lian expresó un sentimiento de culpa que lo atormenta. El día de la desaparición, él y su esposa se fueron a dormir la siesta mientras su hijo jugaba afuera. Ahora, se arrepiente profundamente de esa decisión. “Nos arrepentimos de haber ido a dormir la siesta. Si no lo hubiéramos hecho, lo mirábamos”, lamentó.
Elías Flores es consciente de que un instante de descuido cambió su vida para siempre, y ahora vive con la incertidumbre de no saber qué pasó con su hijo.
Una búsqueda sin descanso en Córdoba
A pesar de la falta de pistas concretas, las autoridades continúan con la investigación y los operativos de búsqueda. Se han desplegado drones, perros rastreadores y efectivos de seguridad en la zona, pero aún no se ha logrado dar con el paradero del niño.
Mientras la investigación sigue su curso, la familia solo tiene un pedido: “Si alguien sabe algo, por favor que lo diga”. La esperanza de reencontrarse con Lian sigue intacta, pero cada día que pasa sin respuestas hace que la angustia sea aún mayor.