A estas alturas, más que un monumento los bomberos voluntarios merecen dos, como en el caso del cuartel de Villa María, que tras dar pelea al fuego ahora también tuvieron que actuar en el agua, para rescatar a un pescador.
Ocurrió en la mañana del domingo, en el cauce del río Ctalamochita, a la altura de la Fábrica Militar de Villa María, a donde acudieron tras recibir el llamdo de un hombre que había quedado en una isla, atrapado sin poder salir por la crecida.
En un operativo en el que participaron ocho efectivos del cuartel de Bomberos Voluntarios y con el uso de una piragua, pudieron sacar y asistir a este hombre, que presentaba un cuadro de hipotermia, según indicaron los propios servidores públicos.
Una vez superado el mal trance y gracias a la asistencia de los bomberos, el pescador pudo recuperarse y no fue necesario trasladarlo a un centro médico, por lo que fue llevado a su domicilio.