Este miércoles, la Cámara del Crimen de Cruz del Eje, finalmente condenó a 23 años de prisión a tres miembros de una familia, la ex pareja de la víctima, su madre, y el hermano de ella, por demostrarse que fueron los autores de una brutal golpiza, seguido de abuso sexual, y el incendio de la casa donde habitaba Gabriel Luis Fernández.
De acuerdo al expediente judicial informado por La Voz del Interior, el hecho se remonta a agosto del 2017, cuando una ex pareja de Fernández, lo acusó mediante su red social Facebook de haber abusado de una hijita de ella, algo que para la Justicia de Córdoba concluyó siendo falso al no haberse encontrado pruebas.
Pero para la familia en cuestión, el dictamen judicial no fue suficiente, y el domingo 13 de agosto de ese mismo año, el hombre fue brutalmente atacado en su propia casa ubicada en Capilla del Monte, en donde fue apuñalado, golpeado con palos y con hierros, también fue atado a un árbol en donde padeció la simulación de una ejecución con un arma de fuego.
Acto seguido, su casa fue incendiada por completo, momento en que finalmente fue salvado gracias a la advertencia de un vecino cercano que vio el humo y los gritos que se escuchaban desde la vivienda.
Fernández terminó internado durante 12 días con un pulmón perforado, una fractura en uno de sus brazos, un corte profundo por encima del ojo derecho, y magullones por todo el cuerpo, entre otras lesiones.
Según los primeros datos aportados por La Voz, la expareja de Fernández, Flavia Silvana Saganias, "fue imputada como instigadora de los presuntos delitos de incendio, privación ilegítima de la libertad, abuso sexual gravemente ultrajante doblemente calificado y homicidio doblemente calificado en grado de tentativa".
Flavia, que llegó al juicio en libertad, este miércoles quedó detenida de manera inmediata por orden de la Justicia, pese a que un grupo de organizaciones sociales de Capilla del Monte se manifestaron en la puerta de los Tribunales en su apoyo.