Talleres se consagró campeón de la Supercopa Internacional al derrotar a River por penales, después de que igualaran 0-0 en un partido desarrollado en la Nueva Olla de Asunción de Paraguay. De esta manera, el equipo cordobés volvió a festejar un título después de la consagración en la Copa Conmebol en 1999. Dos jóvenes futbolistas de nuestra zona fueron parte del título.

Augusto ha sumado minutos esta temporada en el equipo de Medina que inexplicablemente no le dio la posibilidad de jugar la gran final cuando en el alargue le quedaban 3 modificaciones y por las características del deportista de Arroyito era candidato para ingresar. Schott regresó esta temporada al club y ha tenido buenos presentaciones cuando le ha tocado como titular o ingresado desde el banco de suplentes.

La situación de Santino es distinta, viene de jugar el Sudamericano con la Selección Argentina Sub - 20 y está en un proceso de aprendizaje como tercer arquero del equipo de Barrio Jardín. El gran objetivo de Barbi es el mundial, de todas formas, estuvo en tierras guaraníes y quedó en la historia del club.
El partido terminó sin goles en igualdad. Luego de la prórroga, llegaron los penales. La definición por penales fue errática, comenzó el remate atajado de Herrera a Rojas y después Reynoso reventó el travesaño; Pity Martínez convirtió, también Mosqueira y Armani se lo sacó a Tarragona.
Montiel erró el primer penal en su carrera, pero Ortegoza no pudo con Armani y Colidio tenía la chance de título: travesaño. Bustos no falló y cerró la serie de cinco 2-2. Luego, Lanzini la tiró afuera y Benavídez desató la locura de Talleres.