Tras un mes de vacaciones, el Congreso retomará esta semana sus actividades con un plato fuerte en Diputados y una sesión en el Senado, entre peleas internas en el Frente de Todos, que frenan el tratamiento de un par de iniciativas de peso.
A la Cámara Baja asistirá el miércoles a las 17, de manera virtual, el ministro de Salud, Ginés González García, tras un insistente pedido del principal espacio de la oposición, Juntos por el Cambio (JPC), que viene cuestionando con dureza su gestión.
El funcionario se presentará ante la comisión de Salud, que preside el peronista tucumano Pablo Yedlin, ante cuyos diputados brindará una exposición y responderá unas 10 preguntas.
La oposición quiere interrogar al responsable de la cartera sanitaria sobre diversos asuntos relacionados con el manejo de la pandemia, pero principalmente sobre el tema vacunas.
Es por eso, justamente, que estará acompañado por Manuel Limeres, presidente de la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (Anmat), organismo público encargado de analizar y autorizar o no las distintas vacunas contra el Covid-19; y la médica Mirta Roses, integrante de la Comisión Nacional de Inmunizaciones (Conain).
Pero excepto esa reunión de comisión, el FDT por ahora no estaría en condiciones de convocar a una sesión para tratar alguno de los asuntos del temario de sesiones extraordinarias que dictó por decreto el presidente Alberto Fernández.
La traba
Las provincias petroleras frenaron el avance de la prórroga de la ley de beneficios a la producción de biocombustibles, que tiene media sanción del Senado y es un proyecto de la ultrakirchnerista santafesina María de los Ángeles Sacnun.
Se libra una silenciosa pero dura pelea entre gobernadores de provincias hidrocarburíferas con sus pares que administran las que producen combustibles a base de alimentos.
El compromiso, asumido inclusive con la oposición a la que el oficialismo echa manos en Diputados para lograr aprobar leyes, fue tratarlo en la primera sesión extraordinaria de 2021, pero el presidente Fernández no incluyó este asunto ni en el temario original de su decreto ni en su ampliación.
Por eso al oficialismo por ahora no le resulta nada sencillo conseguir el cuórum para tratar ningún tema. Tendrán que negociar.
Otra interna
Pero el FDT también mantiene una disputa interna sobre otro asunto de grueso calibre: la suspensión de las PASO, que deben realizarse dentro de siete meses, o mantener el Código Electoral tal cual está en vigencia.
Los gobernadores quieren suspenderlas. La Cámpora las quiere sostener.
Los gobernadores creen que se debe ganarle tiempo al año para llegar mejor parados para ganar las elecciones en octubre, con la economía menos parada que ahora, con más actividades en marcha y más consumo, y con la pandemia, si es que avanza el plan de vacunación, ya más controlada.
La Cámpora, en cambio, necesita las PASO para librar su propia batalla en la provincia de Buenos Aires, donde se enfrentarán por las listas de legisladores provinciales y de concejales al peronismo de los intendentes. Porque “es con todos”, como dice el eslogan de campaña de la alianza gobernante, pero a la hora de los bifes todos se muestran los colmillos.
Para modificar el Código Electoral no solamente se necesita una ley sino que esta debe ser aprobada por mayoría absoluta en cada cámara. En Diputados eso significa 129 votos. El FDT no los tiene, los debe buscar, pero Máximo Kirchner, el conductor del bloque, no quiere suspender las PASO. Y la presión de los gobernadores crece: senadores del oficialismo ya están diseñando estrategias para agitar el tema.
De todas maneras, en Diputados, la cámara complicada para el oficialismo, no está garantizado el apoyo de la oposición no cambiemista.
Por ejemplo, el lavagnismo aclaró a principios de diciembre que están dispuestos a evaluar el acompañamiento a una eventual suspensión de las PASO en 2021, “con la condición de que se incorpore la boleta única de papel”, proyecto de ley que ya han presentado.
El tema divide aguas en la sociedad misma: según una encuesta de la consultora Management & Fit realizada en enero, el 19,7% de la población está muy de acuerdo con suspender las PASO y el 18,4% está simplemente de acuerdo. Pero ese 38,1% es levemente inferior al 39,3 que está en desacuerdo (20,5%) y muy en desacuerdo (18,8%) con suspenderlas. Un 22,6% de las personas consultadas no tiene posición al respecto o no escuchó ni leyó sobre el tema.
Consenso Fiscal
En el Senado, mientras tanto, se preparan para realizar la primera sesión del año el próximo jueves, con el fin de tratar asuntos de consenso, como acuerdos para la designación de jueces y un proyecto de ley por el que se modifican diversos artículos de la de Defensa de la Competencia.
Pero antes, el miércoles a partir de las 11, la comisión de Presupuesto y Hacienda, que preside el peronista cordobés Carlos Caserio, se reunirá por videoconferencia para tratar el nuevo Consenso Fiscal firmado entre el Poder Ejecutivo Nacional y las Provincias.
Por la corresponsalía de Buenos Aires.