La dirigencia de Huracán publicó este lunes una nueva carta en la que le exige a las autoridades de la Superliga una definición sobre el clásico ante San Lorenzo, correspondiente a la fecha 13 del certamen, que fue posterado este domingo por la final de la Copa Libertadores.
En el documento difundido a través de la página web del club, el "Globo" pidió jugar el partido mañana por la tarde, alegando que el Ministerio de Seguridad de la Ciudad está en condiciones de brindar el operativo de seguridad.
Asimismo, la dirigencia encabezada por Alejandro Nadur solicitó a la Superliga que se haga cargo de la "unilateral decisión" de no organizar el partido. Además, pidió que San Lorenzo (que en la Superliga tiene como vicepresidente a su titular Matías Lammens) se "excuse de participar" de la decisión.
El comunicado de Huracán:
Habiendo transcurrido 24 horas de la presentación realizada por la reprogramación del partido CASLA – Club Atlético Huracán y atendiendo a que no hemos recibido ninguna respuesta formal a la misma, reiteramos nuestra petición de jugar el clásico (ante este nuevo escenario), mañana martes 27 de noviembre por la tarde (entendiendo también la imposibilidad del club local de organizar eventos nocturnos en su estadio).
No nos vamos a extender en los argumentos formales ya expuestos en la misiva enviada ayer, ni nos vamos a detener en las dualidades y ambigüedades que se generaron en estas horas, a partir de declaraciones públicas y privadas de actores directa e indirectamente involucrados en la cuestión; pero aseguramos que resultaría un acto de justicia que la Mesa Directiva de la SL definiera que el partido se realice mañana martes atendiendo a que el Ministerio de Seguridad del GCBA, se ha expresado claramente: recomienda un determinado accionar, pero deja en manos de la SuperLiga la decisión final de jugar o no jugar, GARANTIZANDO el servicio necesario para tal evento.
Huracán tiene muy en claro la situación actual tanto en lo referente a lo acontecido en la frustrada final de la Copa Libertadores (estamos desencantados por esto) como en la organización por parte de nuestro país de la Cumbre del G20 (estamos orgullosos por esto); pero al mismo tiempo tiene absoluta confianza en la profesionalidad de las fuerzas de seguridad y del equipo que conduce el Ministerio de Seguridad, como para confiar en su desempeño ante un encuentro donde solo asiste público local, que se organiza un día de semana y que no conlleva ninguna disputa más que solo un partido de la Fecha 13.
Ahora bien, sería de esperar que las autoridades de SuperLiga hagan pública la nota a partir de la cual toman la recomendación del Ministerio, sin incluir, sugestivamente, en su comunicado por las redes, lo que a renglón seguido el propio Ministerio aclara: si la SuperLiga decide que el partido debe jugarse, el mismo se puede jugar con la seguridad garantizada. Esto se llama asumir la responsabilidad, coloquialmente, hacerse cargo.
El Ministerio de Seguridad puede ¿La SuperLiga no quiere? En tal caso, sería recomendable que expliciten los argumentos que fundamentan su unilateral decisión que sería claramente violatoria de un Reglamento que dicen defender y han hecho a aplicar a rajatablas en toda ocasión y bajo cualquier circunstancia.
Por otro lado, por razones obvias, San Lorenzo (como integrante de la mesa chica) debe excusarse de participar de la decisión. Finalmente recordamos que, disputar el encuentro fuera de la CABA es una alternativa posible y objetivamente viable.