River logró la clasificación a las semifinales de la Copa Libertadores, instancia en la que se cruzará con su clásico rival Boca, tras empatar 1 a 1 con Cerro Porteño, con un gol del que fuera detenido el miércoles por un episodio policial, Nicolás De la Cruz.
El conjunto de Marcelo Gallardo la pasó mal durante el primer tiempo del partido en el hirviente estadio La Nueva Olla, cuando ya a los 8 minutos el local logró ponerse en ventaja tras un centro del argentino Joaquín Larrivey que conectó de "palomita" el experimentado Nélson Haedo Valdez para dejar a su equipo a un tanto de llegar a la definición por penales, con "una vida" por delante.
Sin embargo, bastó una "lavada de cabeza" del "Muñeco" en el vestuario para que todo volviera a la normalidad para River. La clave due Matías Suárez, en un mano a mano con el ex arquero de River Juan Pablo Carrizo, que ganó en primera instancia, pero del rebote apareció De la Cruz, para que con un derechazo alto cambiara la historia.
Ahora a pensar en Boca, pero en el Superclásico del próximo domingo, por la Superliga Argentina de Fútbol (SAF), ya que para el otro, que como éste también se jugará por la ida en el Monumental, hay tiempo hasta el 2 de octubre.
