Dillom fue a Otro Día Perdido, el programa de Mario Pergolini en El Trece, y dejó una de esas frases que prenden fuego Twitter en tres minutos. Entre chistes, pases de factura y su estilo cero filtro, el cantante tiró una opinión sobre Coldplay que cayó como baldazo de agua fría para los fans de la banda británica.
Todo arrancó cuando Mario lo pinchó con el tema. “Coldplay.”, tiró el conductor, y Dillom no esquivó ni un poco. “Sí. Eh, Coldplay. Fui”, respondió. Hasta ahí sin problema. Pero el clima cambió cuando Mario le preguntó si se había emocionado. “No”, contestó seco y directo. Y remató con una comparación que abrió la grieta: “Fui porque me daba curiosidad de ver el show y todo y toda la puesta en escena, pero es un poco como ir a comerse un plato de arroz sin aceite”.
Mario se rió, pero también avisó el revuelo que se venía: “Muy bien. Yo cuando digo eso se enojan conmigo”. Dillom, fiel a su personaje, se hizo cargo: “Enójense conmigo” Y cuando el conductor amagó con correrse, él cerró con la frase que titula el bardo: “Yo me llevo las puteadas”.
Por qué lo que dijo Dillom sobre Coldplay generó revuelo
Dillom no es un invitado cualquiera. Viene de consolidarse como uno de los nombres más punzantes del urbano local, con letras oscuras, humor ácido y una estética que juega a incomodar. En TV, esa mezcla siempre garpa porque no mide las palabras, ni para quedar bien ni para hacer amigos.

Laila Roth consultó sobre una posible colaboración, el ida y vuelta se puso mejor. “Pero si te llama mañana Cris Martin, una collab la haces, ¿cómo no?” Dillom no dudó: “Sí, obvio,”. Laila la siguió: “porque todos comemos arroz.” Y estalló con un chiste bien de sobremesa: “Y sí, porque es arroz sin aceite, pero cada tanto tenés diarrea y comés arroz sin aceite”.
Ahí Dillom aceleró, medio en serio medio no: “Hay que llegar a fin de mes. Pensá que vestirse de mujer y apuñalarse no se paga solo. Uno tiene que hacer un tema con Chris Martin”. Mario no se la dejó pasar: “Pero acabas de decir que no te gustaba”. Y él cerró fiel a su código: “No, no puedo hacer cosas que no sienta. Me no me sale”.

En redes, los fanáticos de Coldplay saltó con todo. “Es tan bruto pobre”, escribió uno. Otra directamente lo fusiló: “Mira este bolu**. Opinando de musica, ¡grasa inmunda!” Dillom, mientras tanto, hizo lo que siempre hace: puso el cuerpo, agitó la conversación y se fue sin pedir perdón.





















