La pampeana Milagros Torroba, creadora de su marca de ropa "Mila Chemin", para la que diseña y confecciona camisas y vestidos desde la ciudad de Buenos Aires, vio seriamente afectada la actividad que desarrolla, como tantos otros casos, a consecuencia de la cuarentena decretada por la pandemia de coronavirus.
A esta joven emprendedora y ganadora del programa #Potenciate del GCBA en el 2019, partiendo de esta dificultad y junto a una amiga, se le ocurrió confeccionar tapabocas utilizando los retazos de tela que le venían sobrando de las camisas y vestidos y que acumulaba desde hacía dos años.
En una entrevista con Vía Santa Rosa, Milagros cuenta que "vivo con una amiga, que es una pieza fundamental y superimportante en todo este proyecto. Con ella nos dimos cuenta de que el tapaboca te tapaba la boca literalmente, no podías generar empatía, no le podías sonreír a la gente. Entonces dijimos: vamos a ponerle una ventana, así podemos sonreír".
"Nosotros lo que hicimos fue transformar una prenda, y en el medio, la ventana está hecha con acetato. Si bien habíamos visto varios videos de cómo funcionaban los tapabocas y máscaras, no somos especialistas en el tema y teníamos mucho miedo", explica Torroba.
Y al diseñar el primer prototipo, las jóvenes percibieron que tendría, además, otra función importante: "enseguida nos dimos cuenta que una persona hipoacúsica podía leer los labios. Yo tengo un familiar muy cercano que tiene hipoacusia, y entonces dije, esto es espectacular para Florencia", relata Milagros.
"También advertimos que era un problema social que se tenía que visibilizar", y a partir de ahí, empezaron a buscar fundaciones e instituciones que pudieran respaldar el proyecto. De ese modo se comunicaron con el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires para presentarles lo que habían creado.
"Nos contactamos con (el vicejefe de Gobierno) Diego Santilli, y a él le llegó mucho porque uno de sus hijos tiene hipoacusia. Hubo mucha conexión y apoyó enseguida este proyecto", detalla la pampeana.
Agrega que Santilli les hizo las gestiones de contacto con algunas instituciones y consiguió tres en el mismo día. "Tener tres instituciones en un día que respalden esto fue algo grandísimo. Nunca lo esperamos", comenta emocionada.
Además, explica que ellas hicieron varias pruebas que pusieron a consideración de las instituciones auspiciantes y que fueron aprobadas, con lo cual ya hay varias que respaldan el desarrollo.
"Hoy en día, comprando un tapabocas, donamos otro para alguna institución. Tal vez la donación parezca poco pero esto es una marca muy chiquita. Queremos que llegue a todos lados", manifiesta Torroba.
Por último, expresa que "está buenísimo poder ver los gestos enteros de la persona", y cuenta que "nos escribió una chica diciendo que estos modelos son muy valiosos para los chicos que tienen Trastorno del Espectro Autista (TEA), porque para ellos es muy importante ver los gestos de la otra persona", con lo cual las gratifica que funcione como herramienta de inclusión.