Las ganadoras del campeonato de Asturias, España, de squash fueron premiadas con dos cajas de cera depilatoria, una lima eléctrica para eliminar las durezas de los pies y un vibrador, junto con los trofeos.
Según consignó El País, la polémica llegó hasta el Instituto Asturiano de la Mujer y provocó tres renuncias en el club organizador, que se plantea su disolución tras la polémica, y en la federación autonómica de squash.
Elisabet Sadó, una de las premiadas de la gala celebrada el sábado 11 de mayo en Las Vegas, en el concejo asturiano de Corvera, aseguró: "Sentí sorpresa e indignación". Y aseguró que estos comportamientos son "la base de todo ese machismo estructural que, en los casos más graves, acaba con mujeres asesinadas".
Las cuatro premiadas presentaron un reclamo dos días después ante la Federación de Squash del Principado de Asturias. Expresaron su disgusto "por unos obsequios sexistas y fuera de lugar".
"Nunca en la historia nos había ocurrido nada parecido", explicó Maribel Toyos, vocal de la junta gestora de la federación, que remitió el asunto al Instituto Asturiano de la Mujer.
El Club Squash Oviedo, organizador del torneo, admitió en un comunicado que los obsequios "fueron inapropiados y nunca debieron ser entregados".
Además, se le pidieron disculpas a las jugadoras, "al squash femenino nacional y al resto de deportistas" y tacharon lo ocurrido de "inaceptable".