A partir de la repercusión mediática que generó el informe del Banco Central con el detalle de los cheques rechazados por falta de fondos de Central, la mesa directiva auriazul con su presidente Rodolfo Di Pollina a la cabeza entregó un panorama global respecto al impacto de la pandemia en la economía del club y relativizó el mal momento económico.
"El contexto es bastante extraordinario, es un gran desafío para cualquier organización, empresa y como club es enorme. Tenemos 11 predios, 420 empleados y un plantel profesional. El club dejó de percibir cerca de 100 millones de pesos solamente de ingresos ordinarios por lo que tenemos que desarrollar una nueva ingeniería financiera para respaldar este nuevo escenario", explicó.
El mandamás auriazul realizó un balance de su gestión. "Cuando asumimos en octubre de 2018 teníamos una deuda de corto plazo que la podíamos haber cerrado en un 60 por ciento con la venta de Zampedri. En ese momento se priorizó lo deportivo, intentar pelear la Copa (Argentina), traer a Rinaudo, a los colombianos, aunque eso último no salió bien. En julio de 2019 tuvimos que volver a invertir en el equipo con la llegada de Cocca y de respaldarlo en un proceso de bajos promedios y la deuda se fue acrecentando por motivos deportivos que permite, además, capitalizarse. Esa deuda, respecto al patrimonio que tenemos, es manejable", abundó.
Luego, y puntualmente respecto del tema "cheques rechazados", Di Pollina explicó: "Básicamente son deudas con tres acreedores netamente de fútbol, con dos de ellos ya se están reconviniendo y pagando alguna cuota, y con el tercero se está hablando para reconvenir". Y agregó: "Esto es lo que están haciendo algunos deudores con nosotros, que no nos pueden pagar y se sientan a refinanciar; no hay ningún otro secreto".
