El vuelo que une Córdoba con las Islas Malvinas, proveniente de la ciudad brasileña de San Pablo, comenzó a operar este miércoles, pese al reclamo de abogados porteños que advertían sobre la posible afectación al mandato constitucional de sostener el reclamo de soberanía en las islas que siguen bajo dominio de Gran Bretaña.
Es que el viaje pudo concretarse luego de que un juez federal confirmara que se trataba de un "vuelo de cabotaje" entre dos provincias argentinas.
El primer vuelo a Malvinas, a cargo de la empresa Latam, partió desde San Pablo a las 6.59, arribó a Córdoba a las 10:15 para luego de una escala partir rumbo a las Islas Malvinas a las 12.30, a donde arribó luego de cuatro horas y 25 minutos.
El viaje fue autorizado por el juez federal Luis Rodríguez, al rechazar un pedido de medida cautelar para suspender ese servicio.
"Las Islas Malvinas corresponden a la Provincia de Tierra del Fuego, Antártida e Islas del Atlántico Sur de la Nación Argentina y el tramo Córdoba-Islas Malvinas es de cabotaje", escribió el juez en su resolución difundida por el Centro de Información Judicial (CIJ).
El magistrado desestimó un pedido de medida cautelar presentado por la abogada Valeria Carreras, parte de una denuncia penal por supuestas irregularidades del gobierno nacional en el manejo de la relación bilateral entre Argentina y el Reino Unido.
"El vuelo es una pérdida de la soberanía nacional", dijo el secretario gremial de APA, Gustavo Fernández, quien explicó que para el gremio se trata de un vuelo internacional y no de cabotaje.
Este primer vuelo desde Córdoba hacia las Malvinas partió con 45 pasajeros, de los cuales cuatro subieron en el aeropuerto Ambrossio Taravella, mientras que el resto ya venía desde San Pablo.
Uno de los argumentos del juez Rodríguez es que ya hubo vuelos, principalmente desde Santiago de Chile a Malvinas, con escala en Río Gallegos, por lo que no se produce un cambio en la situación actual.