Cómo hacer bizcochuelo de limón sin horno y súper esponjoso: receta ideal para acompañar los mates

Una receta ideal para los que no tienen horno o prefieren evitarlo. Queda esponjoso, húmedo y con mucho sabor.

Cómo hacer bizcochuelo de limón sin horno y súper esponjoso: receta ideal para acompañar los mates
Cómo hacer bizcochuelo de limón sin horno y súper esponjoso: receta ideal para acompañar los mates

Si sos de los que no pueden arrancar la merienda sin algo dulce, este bizcochuelo de limón se convierte en una opción rápida y rendidora. La receta fue compartida en TikTok por la cuenta Piccioni Charcutería y ya tiene miles de reproducciones.

Lo mejor es que no necesitás horno: con una freidora de aire y un molde, ya estás. Además, el glaseado cítrico que se le pone encima hace que cada bocado sea una fiesta.

La receta es muy sencilla y no precisa de horno.
La receta es muy sencilla y no precisa de horno.

Qué ingredientes se necesitan para hacer el bizcochuelo de limón

Para el bizcochuelo:

  • 3 huevos
  • 200 g de azúcar
  • Ralladura de 1 limón
  • Jugo del mismo limón
  • 75 cc de aceite (aprox. un chupito)
  • 200 cc de leche
  • 300 g de harina leudante

Para el glaseado:

  • 200 g de azúcar impalpable
  • Jugo de 1 limón
Así queda el bizcochuelo de limón.
Así queda el bizcochuelo de limón.

Paso a paso, cómo preparar el bizcochuelo de limón

  1. En un bowl, rompé los huevos y agregá el azúcar, la ralladura y el jugo del limón. Batí bien hasta que esté espumoso.
  2. Incorporá el aceite y la leche. Mezclá nuevamente.
  3. De a poco, sumá la harina leudante tamizada. Mezclá hasta que la preparación quede sin grumos.
  4. Enmantecá y enhariná bien un molde que entre en la freidora de aire. Verté la mezcla de forma pareja.
  5. Cubrí la superficie con un poco de azúcar común. Esto le da una costrita crocante.
  6. Llevá el bizcochuelo a la freidora a 160°C durante 30 minutos. Hacé la prueba del palito: si sale limpio, ya está.
  7. Mientras se enfría, mezclá el azúcar impalpable con el jugo de limón hasta lograr una textura densa y fluida.
  8. Volcá el glaseado sobre el bizcochuelo frío y dejá que se asiente. Cortá una porción, cebate unos mates y disfrutá.