Se conoce como picada a un plato de entrada típico de la gastronomía de Argentina que incluye varios alimentos servidos en pequeñas cantidades. Es en parte similar a las tapas españolas, pero bastante más parecida al antipasto italiano. Además es ideal para acompañar la previa de partidos de fútbol y más ahora que se viene el Mundial Qatar 2022.
Acerca de su origen existen diferentes versiones. Una de ellas es que surge de la palabra pickle, uno de los ingredientes infaltables en las primeras combinaciones que se hacían en el siglo XIX. Otra que era una costumbre reunirse a comerla al mismo horario en el que repicaban las campanas de la iglesia, fuera al mediodía o al atardecer.
Los diferentes ingredientes de una picada se pueden servir en platitos separados, como el clásico triolet que suele acompañar la cerveza en los bares tradicionales de la Argentina y contiene tres ingredientes (aceitunas, maní, papas fritas u otros) o bien en una bandeja especial, de madera o metal, que puede ser lisa o contener distintos compartimentos.
La picada se puede consumir entre comidas, como plato de entrada o como plato principal cuando es de gran tamaño.
Las picadas que dieron origen a este plato tan típico y tentador, solían ser de gran valor calórico, basadas en fiambres y embutidos, con quesos duros y de pasta, pero actualmente, acorde con la corriente de la vida sana, también se empezaron a elaborar picadas dietéticas y ovolactovegetarianas.
Cómo armar una buena picada y cómo calcular las compras
Armar una picada es una solución ideal para agasajar a los amigos y familiares en todo momento; y el verano es la estación ideal para disfrutarlas.
Gabriela Benac, directora de Lácteos Luz Azul, aconseja para hacer una tabla de quesos y fiambres rica y muy rendidora:
1) El tamaño.
• Picada chica a la que contiene la cantidad de ingredientes suficiente para 4 a 6 personas. Mediana es la adecuada para 6 a 8 invitados.
• Grande alcanza para abastecer a una mesa de 8 a 20 personas (según si es plato único o entrada).
2) La combinación.
• Podés armar una tabla solo de quesos, combinada con frutas secas, desecadas, frescas y/o vegetales. En este caso resultará ideal para comensales vegetarianos.
• Para una picada bien tradicional podés juntar quesos y fiambres, con las guarniciones de frutas y aceitunas o picles que le brindan color y frescura.
• Si querés algo más light intercalá con quesos más bien livianos y dips para mezclar con bastones de apio o zanahoria.