El famoso y temido chef Germán Martitegui se ha ganado el corazón de la audiencia al ser jurado del certamen de cocina que es furor en la TV y en las redes, Masterchef.
Fuera de las pantallas, el chef es dueño de Marti, su propio restaurante, en pleno Recoleta. Su restaurante anterior, Tegui, fue elegido entre los mejores del mundo por una organización que premia a lo más exquisito de la gastronomía internacional y quedó en el puesto 86 de la lista que cada año elabora la organización “Los 50 mejores restaurantes del mundo” pero que abarca un total de 120 locales.
Pero Martitegui tiene su propio rincón alejado de las luces. Se trata de una cabaña en las islas del Delta, en el Tigre, en la que el chef aprovecha los días de descanso y relax.
A la casa se puede acceder solo a través de una lancha, que desemboca en un muelle que lleva a la cabaña. Rústica, tiene un gran balcón que permite almorzar en contacto con la naturaleza y disfrutar de las delicias que puedan salir de un gran horno a la leña.
La propiedad no posee agua corriente ni luz eléctrica, por lo que es una verdadera experiencia en la naturaleza, para disfrutar del verde y de los días veraniegos. El paseo por esta casa del chef lo hizo años atrás Deborah de Corral, en un programa especial emitido por Telefé.
Los comentarios de Germán Martitegui sobre la paternidad
Para el festejo de un día del padre, Germán Martitegui escribió una reflexión sobre lo que ha significado para él la llegada de sus dos hijos.
“Cuando llegaron Lorenzo y Lautaro a mi vida, la cambiaron para siempre, el instinto del cuidado es bastante primitivo, todos los animales lo tienen, después lo razonás, lo procesas, lo mezclas con tu experiencia como hijo, tu pánico a equivocarte, tu educación y ¿después? Después es como andar en bicicleta, el amor hace todo lo demás”, detalló el famoso chef junto a una producción de fotos de los tres.
Martitegui fue papá de ambos nenes a través de la subrogación de vientre. Muchos detalles no se conocen sobre el proceso, ya que el chef mantiene su vida privada lejos de las redes y de la pantalla, pero lo que no guarda en secreto es el gran amor y orgullo que tiene por ambos pequeños.
Una faceta que sus miles de seguidores en Instagram conocen y que es totalmente diferente a la faceta seria de jurado que mantiene durante el certamen de cocina.