La vida de lujo que llevan los deportistas de alto rendimiento, como Lionel Messi, Cristiano Ronaldo o Rafael Nadal, siempre llama la atención, gracias a su fama y las grandes sumas de dinero que generan con sus trabajos pueden darse lujos extravagantes que no cualquiera puede tener.
Dentro de las diferentes ostentaciones a las que pueden llegar los deportistas, en el último tiempo hubo una que comenzó a ponerse de moda, pero solo en aquellos pudientes. Es que las figuras deportivas con mayor riqueza del planeta han comenzado a mostrar sus lujosos yates y acá te mostramos algunos de los más llamativos.
Los lujosos yates de los deportistas
Los yates se han convertido en el lujo de moda entre los deportistas. Es que las naves significan un gran poderío económico, ya que tan solo por alquilarlo el costo es muy elevado y muchas estrellas optan solo por usarlo en vacaciones o temporadas de descanso. Pero hay algunos que cuentan con los millones que se necesitan y tiene un barco de recreo 24/7 a su disposición.
Rafael Nadal
El tenista español adquirió un 80 Sunreef Power Great White en 2020. La embarcación tiene capacidad para 8 personas, cuenta con casi 24 metros de eslora y 12 metros de manga, distribuidos entre sus 4 cabinas. Además, su casco de estribor tiene una lujosa suite. Uno de los camarotes de invitados y los cuartos para la tripulación ¿Su precio? 6 millones de dólares.
Cristiano Ronaldo
El crack portugués compró en 2019 un increíble yate con cinco habitaciones, un gran salón y un lujoso comedor. La nave es un Aya London, que cuesta 200.000 dólares por semana en costos operativos, cuenta con 155 pies, con un jacuzzi, gimnasio, bar y seis cabañas. El precio es de casi 8 millones de dólares.
Lionel Messi
El capitán de la Selección Argentina no suele compartir su lujosa vida, pero su yate es de público conocimiento, ya que es uno de los lugares preferidos del 10, donde comparte momentos junto a su familia y amigos. El Seven C del que es dueño Messi, cuenta con espacio para 9 personas. Su alquiler por semana puede llegar a costar 50.000 dólares.