Gonzalo Heredia, reconocido por su trayectoria en la actuación, demuestra que su rol como padre es una prioridad en su vida. El galán se casó junto a la actriz Brenda Gandini, y tuvieron dos hijos Eloy y Alfonsina.
En la actualidad, el actor se encuentra alejado de la pantalla chica, pero este miércoles visitó a Sebastián Wainraich en su ciclo televisivo La noche perfecta (El Trece). Allí, el galán abrió un debate al revelar una de sus polémicas costumbres durante la intimidad.
El escandaloso detalle sobre la intimidad de Gonzalo Heredia
Con un poco de timidez, el conductor le preguntó: “Hay algo que me da vergüenza. Me da un poco de pudor, pero te lo voy a preguntar: Alguna vez dijiste que sos muy hablador en el sexo... ¿Sos de los que anuncia que va a hacer tal cosa, de los que hablan del pasado, de lo que acaban de hacer?”.
“Me gusta hablar del pasado y me gusta hablar del futuro”, respondió la pareja de Brenda Gandini, sin elegir ninguna de las dos opciones.
Debido a la extraña contestación, Sebastián confesó: “Para mí, el que habla mucho es porque se está aburriendo”. Sin embargo, Gonzalo se mostró en desacuerdo con la postura: “No es verdad”, le dijo, enojado. “A veces, me gusta más que me hablen que el acto mismo. Yo soy de la época del teléfono de línea, de las primeras 0600 hot”, agregó, dejando impactados a todos.
Gonzalo Heredia se sometió a un tratamiento estético por su hija Alfonsina
Recientemente, Heredia sorprendió a sus seguidores al compartir un tierno video en su cuenta de Instagram. En la grabación, se le ve junto a su hija menor, Alfonsina, de 6 años, participando en un juego donde la niña realiza un tratamiento estético improvisado a su padre. La escena refleja la complicidad y el amor entre padre e hija, mostrando un lado más íntimo y cercano del reconocido actor.
Brenda, también parte fundamental de esta familia, no dudó en comentar en la publicación, destacando el ingenio de su hija: “Su paciente de práctica”, escribió, evidenciando la ternura y la conexión familiar.
Esta muestra de amor y complicidad entre Gonzalo y su hija Alfonsina refleja la importancia de la familia en la vida del reconocido actor argentino, quien, además de brillar en la pantalla, encuentra en su hogar el verdadero sentido de la felicidad y el amor incondicional.