La historia de Trianela, la primera piloto trans en Argentina: “Siento que siempre fui mujer”

Traniela comentó cómo fue su proceso de conversión con su familia y en el trabajo: “Para mí, nunca existió la discriminación”.

La historia de Trianela, la primera piloto trans en Argentina: “Siento que siempre fui mujer”
La historia de Traniela, la primera piloto trans en Argentina.

Traniela Carle Campolieto, derribando barreras y prejuicios, se convirtió en una referente importante en el mundo de la aviación: es la primera piloto trans en Argentina. Con 48 años, y una vasta experiencia en la aviación, Traniela visibiliza su conversión tanto en la vida privada como en lo laboral.

“Hace muchos años que soy Trianela, pero me empecé a visibilizar hace poco. Dentro poco va a ser un año. Se ve rápido, pero lo no fue”, afirmó la comandante en el programa El Diario de Mariana. “En mi vida privada vivía como Trianela, hacía el trabajo como hombre, salía a la calle como hombre también. Siento que siempre fui mujer”, indicó.

La pilota indicó que tiene tres hijas y que todavía sigue casada, y detalló cómo se lo comentó a su familia: “Un año antes de que saliera a la calle y de ir al registro civil, le cuento primero a mi mujer, que se lo tomó bien. No le súper agradó, pero se lo tomó bien”.

Y añadió: “Le conté que me vestía de mujer en la intimidad, se lo expliqué así. Yo creo que se lo imaginaba, pero no con tanto furor”. Afirmó que, al comentárselo a su esposa, sintió “una mochila menos en la espalda”, “libertad, poder elegir la ropa, poder lavar mi ropa”, agregó. “Era tan íntimo que yo no lavaba mi ropa, tenía que esperar el momento justo para poder hacerlo. Era una doble vida que ya se estaba poniendo media densa”.

“Lo que me ocurría era que yo no me sentía mal, me sentía muy bien siendo hombre, hasta que llegó un momento que no me sentía tan bien: ‘Quiero dejar de ser hombre y ser una mujer’. Es difícil entender”, indicó.

Por otro lado, aseguró que su conversión no fue un proceso doloroso: “Yo llevaba lo que es una persona bigénero, que es una persona que tiene dos géneros, convive de una forma o de otra a medida que va pudiendo. Por ahí, en lo público prefiere ser un género y en lo privado otra, lo que me ocurría a mí era eso, hasta que dije: ‘ganó Trianela, quiere expresarse Trianela, y ser una mujer, ayudar a los demás y tratar de tener un sentido social como mujer’, y eso es lo que decidí en realidad.

Cómo fue el proceso de conversión en el trabajo

“No encontré discriminación en el trabajo, ni en amigos, ni en la calle, ni en el día a día. Para mí, nunca existió la discriminación. Nunca me trataron mal”, indicó Traniela, aunque admitió haber recibido cuestionamientos en las redes.

Traniela trabaja en el mundo de la aviación hace 24 años.
Traniela trabaja en el mundo de la aviación hace 24 años.

Sobre esta misma línea, recordó una experiencia que tuvo con un pasajero en su primer vuelo internacional como capitana mujer: “Era el vuelo de regreso de Miami hacia Buenos Aires. Ya con todos los pasajeros a bordo, las puertas cerradas, pedimos autorización para hacer el remolque, pero no nos dejaban porque había otro avión que tenía un problema mecánico, entonces hago un anuncio a los pasajeros que íbamos a tardar unos 10 minutos y en ese momento, me presento”.

Y continuó: “Un pasajero le pide al jefe de cabina bajarse: ‘Yo con un traba al comando, no quiero volar’, entonces la tripulación de cabina le explicó que era un comandante que ya tenía experiencia, yo no podía abandonar el puesto de pilotaje para ir a saludarlo. Cuando hicimos el relevo de tripulación, me acerqué”.

La pilota comentó que, aunque la tripulación lo convenció de quedarse, estaba “muy malhumorado”: “Lo saludo, y me dice: ‘Ya sé quién sos’. Le expliqué devuelta que tenía mucha experiencia en el avión, que no había problema, y que todo iba a transcurrir de forma normal. La mujer le decía: ‘Viste que te dije’. Ahí se relajó. Yo creo que esta persona nunca se va a olvidar de esto”, indicó.

Asimismo, Traniela comentó cómo se lo comunicó a la empresa: “Mi salida del closet fue muy planificada. Dije: ‘Ahora tengo las vacaciones, que son 35 días, entonces ahí voy a aprovechar a hacer todos los trámites’. Dentro de esos trámites, aviso a la compañía con quién se iban a encontrar y me dijeron: ‘Entonces te vamos a hacer el uniforme nuevo’, y en 48 horas tuve el uniforme femenino”.