Puja entre el Gobierno y el FMI por el valor del dólar

El organismo publicó la evaluación de la octava revisión y dejó entrever que el dólar blend se terminaba este mes. Economía ratificó que no habrá cambios.

Luis Caputo y la titular del FMI, Kristalina Georgieva. (Foto: X / @Luiscaputoar)
Luis Caputo y la titular del FMI, Kristalina Georgieva. (Foto: X / @Luiscaputoar) Foto: web

El Gobierno nacional ratificó que no modificará las condiciones del mercado cambiario, luego que el Fondo Monetario Internacional (FMI) publicó un informe donde dejó trascender que a fin de este mes concluía el dólar especial para exportaciones.

El FMI publicó este lunes la versión completa del reporte que el staff técnico le elevó al Directorio del organismo que derivó en la aprobación de la octava revisión y el giro de US$ 800 millones.

En ese documento el FMI indicó que el Gobierno nacional eliminaría el “dólar blend” lo cual podría derivar en una modificación del tipo de cambio para mantener la competitividad cambiaria.

El “dólar blend” es el tipo de cambio que reciben los exportadores, habilitados a liquidar el 80% de sus ventas en el mercado oficial y el 20% en el Contado con Liquidación (CCL). Actualmente es del orden de $ 973,09.

“Las autoridades siguen comprometidas a deshacer todos los controles de capital y restricciones cambiarias, comenzando con las medidas más distorsionantes, incluida la eliminación del esquema de exportación preferencial 80%-20% y eliminar el impuesto PAIS antes de finales de 2024″, escribieron los técnicos del organismo liderados por Luis Cubeddu.

Las exigencias del FMI, las respuestas de Argentina

Cuando el jueves pasado el FMI publicó un adelanto del staff report el equipo económico salió a contestarle de inmediato: “El BCRA contempla avanzar en la liberación de controles cambiarios y en una mayor flexibilidad cambiaria siempre y cuando estas medidas no impliquen riesgos excesivos para el proceso de reducción de la inflación y fortalecimiento de su hoja de balance, tal como se refleja en el acuerdo”.

Y enfatizó que “el proceso lo definirán las propias autoridades de Argentina contemplando la evolución de las variables económicas relevantes, quienes compartirán con el FMI los parámetros que serán monitoreados, sin incluir compromisos de fechas o medidas específicas”.

Las diferencias también alcanzan al impuesto PAIS, dado que según el FMI se eliminará antes de fin de año, lo cual no parece tan claro con el actual balance presupuestario donde este tributo ha tenido particular injerencia.

Este es un nuevo capítulo de la pulseada que el FMI y el Gobierno argentino vienen teniendo por el precio del dólar y las restricciones cambiarias y es uno de los puntos que frena el diálogo para un nuevo acuerdo que incluya fondos frescos.

En otro orden, el FMI corrigió a la baja las proyecciones de inflación para 2024 al quedar en 140% desde el 149% previo.

A su vez, el Gobierno le pidió al organismo reducir la meta de superávit fiscal de 2,1% a 1,7%, producto de la demora en la implementación del paquete fiscal y de la postergación de ajustes de tarifas para evitar que se dispare la inflación.

También hubo un cambio en las metas de acumulación de reservas trimestrales, pero no el saldo anual de US$ 7.500 millones computados desde la asunción del nuevo gobierno.

A fin de junio subirán a US$ 10.900 desde los US$ 9.200 previo, mientras que a fin de septiembre se incrementan a US$ 8.700 desdelos US$ 7.600 anterior.

A su vez, el organismo confirmó su estimación de que la economía argentina caerá 3,5% en 2024 para crecer 5% el año próximo. Para este objetivo espera que se active el crecimiento a partir del segundo semestre de ese año.

Sin actividad local por el feriado, la referencia a este escenario fue el comportamiento de la plaza de Nueva York. En Wall Street los bonos argentinos cerraron con pérdidas, lo cual dejó una tendencia negativa para el arranque local este martes.

El impulso que tuvieron los activos locales tras la sanción de la Ley Bases encontró un freno al conocerse las diferencias con el FMI.

Si bien el organismo destaca los resultados logrados por el programa que llevó adelante el Gobierno desde su asunción, en los últimos meses puso el foco en el mercado cambiario y por tanto no parece dispuesto a abrir la puerta para que se abra la discusión para el envío de fondos frescos.

La consecuencia directa es que se prolongará la liberalización del mercado de cambios.

Al parecer cualquier nuevo préstamo parece estar muy supeditado a que el Gobierno dé señales claras del levantamiento del cepo y que finalmente pase a tener tasa real de interés positiva, otro punto que promete traer controversias.