El hotel Edén de La Falda es uno de los más antiguos de Córdoba y el que acumula cientos de místicas historias alrededor de sus orígenes, como también de las personas que se hospedaron allí. Cuando fue construido en 1898, la gran fachada delantera contaba con un águila gigante de bronce.
El animal desapareció en 1945, cuando Adolf Hitler cayó y por ende, terminó la Segunda Guerra Mundial. Nunca se supo quién la sacó ni cuál fue destino. Pero, se supone que confundieron el águila con un símbolo nazi y por eso, la quitaron.
VOLVIÓ EL ÁGUILA IMPERIAL AL HOTEL EDEN DE CÓRDOBA: ¿SÍMBOLO NAZI?
En el marco de una puesta en valor del hotel, la empresa que mantiene el predio contrató un reconocido artista de herrería para reconstruir aquella mítica águila. La réplica fue hecha en base a fotografías viejas y ya no es de bronce, sino de soldaduras de alambres.
“Es lo que le faltaba al hotel para recuperar la imagen de la fachada que tenía en sus años de apogeo”, dijo Gabriela Sánchez, guía del lugar. “El águila nazi era bastante diferente a ésta. Tenía una cruz esvástica, nada que ver”, aclaró la mujer. Asimismo agregó que se trata de un animal de origen romano y no alemán.
Hitler tenía nueve años cuando el Edén fue inaugurado. Sin embargo, años más tarde el matrimonio Eichorn, dueño del emprendimiento, estuvo vinculado con el genocida. “Los Eichorn conocieron a Hitler en 1921, en Alemania, antes de que llegara al poder. Seducidos por sus ideas, formaron parte de los financistas que aportaban para sus campañas”, señaló la mujer.
“En 1945, dejaron el hotel porque como botín de guerra fue incautado y ocupado brevemente por la diplomacia japonesa”, continuó Sánchez. Fue en esos días que quitaron el águila. Más tarde, Juan Domingo Perón les devolvió el complejo a sus dueños, pero tanto ellos como el hotel ya habían perdido su prestigio.