La presentación de Maroon 5 en el entretiempo del Super Bowl fue aplaudida por algunos y señalada por otros como un claro ejemplo de "doble estándar". Lo que ocurrió fue que durante la canción "Moves Like Jagger", uno de los hits de la banda, el cantante Adam Levine se sacó la musculosa y dejó su torso al desnudo.
Este episodio recordó lo que ocurrió en el año 2004, cuando Janet Jackson mostró un pezón en el show de entretiempo ese año, con una pequeña diferencia: mientras Jackson desató un escándalo nacional de porporciones épicas, Levine fue ovacionado.
En aquella ocasión, sobre el final del tema, Justin Timberlake le arrancó una parte del vestuario a Jackson y durante dos segundos se vio uno de sus pezones. De nada sirvió que los artistas explicaran que se trató de un error y que no era su intención que eso pasara.
Ese episodio fue discutido durante semanas y la FCC (Federal Communications Commission) recibió más de 500 mil quejas de los espectadores. Incluso, America Online, la empresa que patrocinó el show, exigió el reembolso de los 9,3 millones de dólares que había pagado para hacerlo. Y una mujer de Tennesse inició un juicio en representación de "todos los ciudadanos estadounidenses que observaron la conducta escandalosa".
Ahora, los usuarios de las redes sociales se preguntan si ambos artistas no deberían ser medidos con la misma vara...