Nada puede silenciar al Camp Nou que el temor de una lesión de Lionel Messi y más a solo cuatro días de un clásico ante el Real Madrid.
Los hinchas del Barcelona sintieron ese pavor durante el partido por la Liga española ante el Valencia el sábado, cuando Messi se sentó al lado de la cancha, estiró la pierna derecha y empezó a recibir un masaje por un preparador físico del equipo.
Poco importó que el goleador histórico azulgrana recién había firmado un enésimo doblete para remontar una desventaja de dos goles y rescatar el empate 2-2 ante el Valencia. La mínima pista de que pueda estar fuera de acción en un momento crucial de la temporada, con títulos en juego, inmediatamente eclipsó otra formidable actuación del astro argentino.
Luego de anotar el tanto para el empate, con un magistral zurdazo a los 64 minutos, Messi debió recibir masajes tras sufrir un golpe en la parte interna del muslo derecho. El atacante pudo seguir jugando, pero su nivel decayó en el tramo final.
Messi pudo quedar lastimado tras un contacto con el zaguero valencianista Antonio Lato.
Se tendrá que esperar evolución y pruebas para determinar su presencia ante el Madrid el próximo miércoles, dijo el técnico del Barcelona Ernesto Valverde.
"Él está bien. Vamos a ver, tenemos que esperar a que le realicen las pruebas", dijo Valverde. "Esperamos que se pueda recuperar igual que los demás".
El golpe en el muslo sufrido por Messi llega en un momento inoportuno, a solo cuatro días de recibir al Madrid en el partido de ida de la semifinal de la Copa del Rey.
El Barcelona vio rota su racha de triunfos, que llegó a ser de ocho partidos en la Liga. Llegó a los 50 puntos para seguir en la cima con seis unidades de ventaja sobre el Atlético de Madrid, y 11 con respecto al Real Madrid, que juegan el domingo.
Kevin Gameiro adelantó a los visitantes al culminar un contragolpe a los 24 minutos y Daniel Parejo amplió la delantera de penal a los 32.
Pero Messi puso en marcha la remontada al convertir de penal a los 39 y luego definió con un disparo desde la frontal del área. Messi facturó su doblete número 115 en la Liga.
Ambos equipos dieron descanso a varios titulares por su apretada agenda de partidos en febrero. El Valencia también afronta un cruce de semifinales en la Copa del Rey, midiéndose contra el Real Betis.
Gameiro, quien tuvo que salir de cambio por un golpe en la cabeza a los 40, abrió el marcador con una media vuelta dentro del área, después de que Rodrigo Moreno condujo el esférico desde su campo y filtró un pase al área para que firmara el tanto.
La apuesta al contragolpe volvió a dejar buenos frutos cuando el ruso Denis Cheryshev fue derribado en el área por Sergi Roberto para que se decretara el penal que Parejo transformó en gol.
Con una pesada desventaja, Messi apareció en escena. Puso a los azulgranas en el marcador con un buen cobro de un penal tras de una falta sobre el portugués Nelson Semedo a los 39.
En el complemento, la balanza se fue del lado del líder, que desde el primer momento fue al asedio y pronto tuvo una opción para emparejar con un disparo de Messi que fue atajado por el arquero Neto a los 47.
Messi arrancó el alarido de las gradas con el grito de gol cuando el chileno Arturo Vidal le cedió el balón cerca del área, desde donde sacó un zurdazo espectacular, que pasó a un lado de dos defensas y se metió a las redes.
El conjunto catalán bajó revoluciones en el campo después de que Messi sufrió el golpe, que silenció a los aficionados cuando necesitó de asistencia en una de las bandas. Messi volvió al partido, pero ya con más precauciones y sin tanto ímpetu para buscar otro tanto.
Messi estiró a nueve partidos su racha goleadora y se afirmó al frente de la tabla de cañoneros con 21 conquistas en 22 fechas.