“Mi padre fue encarcelado, llevado vivo, pero tuve la suerte de que lo devolvieron vivo. Quiero agradecer y reconocer por su tarea diaria: Memoria, Verdad y Justicia”, dijo el presidente del Concejo Deliberante de la Capital, doctor Fernando Arturo Juri, al recordarse la figura de su padre, el ex gobernador de la provincia, Amado Juri, en el periodo del 25 de mayo de 1973 y el 24 de marzo de 1976, cuando fue destituido por el golpe militar.
El momento emotivo de la reunión del Concejo Deliberante, fue cuando se declaró de interés municipal el programa “Volver a casa”. Se trata de la “restitución de la indumentaria, para una reparación histórica y la construcción de memoria colectiva”.
Se indicó que este programa, impulsado por la Secretaría de Políticas Universitarias de la Universidad Nacional de Tucumán, donde participan estudiantes, docentes y arqueólogos “busca recuperar y restituir la indumentaria de desaparecidos cuyos restos fueron identificados en el centro clandestino de detención e inhumación Pozo de Vargas”.
La iniciativa se sancionó por unanimidad. Cabe señalar que el Pozo de Vargas, se encuentra en los límites de San Miguel de Tucumán y Tafí Viejo, sobre Camino del Perú.
Entre el público que asistió a la reunión se encontraba Josefina Molina, militante de Derechos Humanos y de las políticas de Memoria, Verdad y Justicia, hija del doctor Dardo Molina, quien en 1976 fue secuestrado y asesinado por la dictadura militar, cuando se desempeñaba como vicegobernador de Tucumán. Era el compañero de fórmula del gobernador Juri.
Amado Juri falleció a los 84 años el 14 de octubre del 2000. A su vez, los restos de Molina, fueron identificados en el Pozo de Vargas.
