“Comer, rezar, amar” se convirtió en una de las películas ícono de Julia Roberts. Pese a cumplirse 12 años desde su estreno el 13 de agosto de 2010, la cinta pasó a la inmortalidad como un clásico del cine entre otras cosas por su apuesta culinaria.
Basada en la autobiografá homónima de la escritora Elizabeth Gilbert, la estrella de Hollywood se puso en la piel de la escritora y revivió algunos de sus momentos más trascendentales. Bajo el argumento de una mujer cansada de su vida rutinaria que decide explorar nuevos horizontes, las filmaciones se realizaron en diferentes partes del mundo muy representativas.
La protagonista de esta película diriga por Ryan Murphy decide dejarlo todo para viajar durante un año. Y así fue como comió en Italia, rezó en India y amó en Indonesia. Es justamente en el país europeo donde el ojo de la producción fue puesto en la comida y la presentación de platos típicos.
Cómo hacer Espagueti all’Amatriciana
Uno de los más destacados del film son sin duda los Espagueti all’Amatriciana, el menú especial que probó Julia Roberts en una de las escenas más recordadas. Este es un plato clásico la ciudad de Amatrice en la provincia montañosa de Rieti en la región de Lazio.
La clave está en la famosa salsa a base de guanciale, es decir carrillo de cerdo curado, pero para una versión casera se puede reemplazar por panceta. A esta preparación no le pueden faltar los spaghettis frescos, aunque puede ser otro tipo de fideo como Garofalo, los Linguine.
Ingredientes
- 300 g. de spaghetti
- 125 g. de panceta o guanciale
- 400 g. de tomates maduros
- 1 guindilla o peperoncino (ají picante)
- Queso pecorino romano (o cualquier queso para rallar rico)
- Sal y pimienta negra recién molida (al gusto)
- Aceite de oliva virgen extra
Preparación
- Cortar la panceta en tiras y la incorporar a una cazuela ancha.
- Añadir también la guindilla o peperoncino troceado y cocinar hasta que la panceta esté dorada.
- No es necesario añadir ningún tipo de aceite, a medida que la panceta de va dorando irá soltando su propia grasa. Tampoco añadir sal, ya que la panceta curada ya le aportará su parte.
- Si se quiere reducir algo el picor final del plato, se puede añadir la guindilla troceada pero eliminando sus semillas.
- Cuando la panceta esté lista retirar la grasa que pueda haber soltada, si está es en exceso.
- Pelar los tomates y los cortarlos en daditos pequeños. Incorporar los tomates troceados a la cazuela con la panceta y cocinamos 15 minutos a fuego bajo.
- Mientras se cocina la salsa, cocer la pasta.
Empletado
- Una vez cocidos los fideos, escurrir inmediatamente y juntarlos con la salsa amatraciana.
- Apagar el fuego y revolver bien para integrar pasta y salsa.
- Servir la pasta y espolvorear una pizca de pimienta negra en cada plato y una porción de queso pecorino rallado en el momento.