Lady Di siempre se caracterizó por ser un referente de la moda, solía lucir diseños exclusivos de famosos diseñadores que daban todo por vestirla. Pero hay un traje que se, sin dudas, se llevó todas las miradas de sus admiradores y, ahora, puede ser del que esté dispuesto a pagar más por él.
Se trata de un increíble vestido largo negro, con escote "V"y hombros descubiertos, que la princesa de Gales usó en noviembre de 1985 en una gala en la que protagonizó un baile con John Travolta, el actor que estaba en pleno auge después de haber dejado una huella en el cine con Fiebre de sábado por la noche (1977).
El diseño pertenece al estilista de moda Victor Edelstein, quien vistió a Lady Di durante 11 años. Y, según cuenta la leyenda, la princesa viajó a su tienda de Kensington y se enamoró del diseño, pero se lo pidió en un tono oscuro para vestir acorde al protocolo.
Lucy Bishop, de Kerry Taylor Auctions, anunció en diálogo con el diario Daily Mail que este vestido será subastado el próximo 9 de diciembre en Londres. "Es posiblemente el vestido más icónico de Diana, las fotos de ella bailando sobre la pista con un apuesto John Travolta en la Casa Blanca causaron sensación, y aún hoy todo el mundo las recuerda", explicó la experta en moda vintage y principal subastadora de antiguedades del Reino Unido.
Además, la anticuaria destacó que "el protocolo requería que se vistiera de manera recatada, sin embargo, este vestido evoca mucho el viejo glamour de Hollywood, con su escote off-the-shoulders". Por eso, esta se convirtió en una de las prendas más admiradas, ya que la princesa logró combinar los requerimientos de la realeza con su estilo único.
La subasta está organizada por Kerry Taylor Auctions y el valor de la prenda rondará los 292.000 y 409.000 euros. Esta es la tercera vez que se subasta este vestido de Ladi Di, la primera ocasión fue para recaudar fondos para organizaciones benéficas, y fue adquirido por Maureen Dunkel, quien en 2011 se declaró en quiebra y lo volvió a subastar. En ese entonces, lo compró un británico para regalárselo a su mujer. Ahora, la prenda será nuevamente entregada al mejor postor.