Desde las profundidades de Buenos Aires hasta los recovecos más ocultos de la imaginación, la historia de vida de Agustina Restucci desafía los caminos convencionales. Con una formación en Ciencias Antropológicas, adquirió las herramientas para desentrañar los misterios de la humanidad, aunque fue la narrativa la que finalmente le permitió dar voz a esas historias.
Dentro de su obras, Restucci cuenta con títulos como “Después de Judas” (2016), La Mesías (2020) y El origen de las Flores (2020). En entrevista con Vía País, Agustina Restucci nos cuenta un poco sobre su camino como autora independiente, además de los misterios que se esconden detrás de sus historias, las cuales prometen atrapar al lector de principio a fin.
“Me gusta pensar mis últimas historias como una revolución silenciosa que busca derribar estereotipos. Las protagonistas de mis historias son guerreras que ignoran su poder, hasta que lo encuentran. Quiero que sirvan para inspirar a las personas que piensan que no pueden hacer algo y que vean que si mis protagonistas pudieron, a pesar de la adversidad, ellos también pueden”, explica.
Quién es Agustina Restucci
A diferencia de aquellos que nacen con una pluma en la mano, Agustina tardó casi tres décadas en descubrir su vocación, pero siempre supo que vivía en una historia. “Mis inicios como escritora no siguen el guión tradicional. Siempre pienso que no empecé escribiendo, sino observando. No tuve contacto con la escritura hasta mi vida adulta, cerca de los 30 años. Lo que sí siempre tuve en abundancia, aunque no era consciente de su particularidad, fue una imaginación inmensa. Desde que tengo recuerdos, vivo dentro de una historia”, explica.
“Nací en Buenos Aires. Desde muy temprana edad me sentí inmersa en una especie de mundo aislado imperceptible a simple vista. Como si adentro mío conviviera con miles de personas, que también eran yo misma, con diálogos, escenas, mundos, ideas. No sé si será algo corriente en todas las personas, pero pienso que en mi caso en particular, una vez que fui consciente e hice contacto con todo eso que tenía adentro, se gestó el camino que me llevó a convertirme en escritora en mi adultez”, rememora.
Sobre sus estudios, Agustina tampoco eligió una carrera basada en letras, aunque la curiosidad por entender al ser humano y la cultura estuvo ahí: “Estudié Ciencias Antropológicas en la Universidad de Buenos Aires. Muchas veces pienso en la razón por la cual elegí esa carrera. No tengo una respuesta inamovible. Si lo pienso ahora, mirando para atrás, no sé si fue la mejor elección para mi desarrollo laboral, de hecho no lo fue. Nunca ejercí como antropóloga y creo que por lo menos en Argentina, es un camino complicado. Pero sí creo que mi yo de 18 años tenía adentro una curiosidad y un deseo de entender inmenso. Esa atracción que siempre había sentido por lo que no se ve a simple vista, por lo que hay detrás de las palabras, de las miradas, de las acciones de las personas, esa intriga por entender las fuerzas que movilizaban a la gente, las estructuras sociales, los deseos personales, la pelea entre ambos, me llevó hacia la antropología social”.
“Hoy creo que la antropología me dio las llaves para abrir un laberinto donde cada pasillo se convirtió en una nueva manera de ver el mundo. Aprender de otras culturas me enseñó a mirar con lupa, a ver más allá de las apariencias, a buscar estructuras más profundas, a cuestionar lo que otros dan por hecho y creo que muchas veces es eso precisamente lo que viven mis personajes” agrega.
La autora acepta que el camino a la escritura no fue de golpe, ella lo define como “una evolución natural que llevó tiempo”. “Creo que mis inicios en la escritura no se limitan a un lugar o tiempo particular, sino que son el resultado de un proceso largo y complejo. Pero si tuviera que definir o elegir un día en particular: la primera vez que escribí fue en un café, a la tarde, mientras esperaba. Y la primera historia que quise contar fue la de mis abuelas, en realidad mi abuela paterna y su hermana, que para mí eran dos personas atrapadas en su tiempo. Lo que voy a decir es obvio, pero si hubieran nacido en otra época, una más moderna, hubieran sido completamente distintas. Mi abuela en especial tenía una chispa, una picardía, una energía magnética y contagiosa en sus ojos. Era especial. Y no se si su vida se condijo con todo lo que yo creo que tenía adentro. Y pienso que las estructuras sociales, sobre todo de su época, eran muy pesadas. Todo eso que pensaba mientras hablaba con ella y la miraba, fue el puntapié inicial para empezar a escribir. Lo hice, de manera muy principiante, en mi primera novela “El Cuaderno de Cuero”. Es la historia de una nieta y una abuela que descubren secretos familiares ocultos”, rememora.
La vida de una autora independiente en Argentina
En un mundo gobernado por las redes sociales, las plataformas de streaming y -aun- por la televisión, la lectura también ha logrado conservar su lugar con historias frescas y diferentes. Sin embargo, el camino de los autores no es siempre fácil y más si hablamos de no depender de una editorial tradicional para publicar tus trabajos: “Ser autora independiente, para mí, es un acto de libertad creativa y también de audacia personal. Es un camino que me da la posibilidad de decidir prácticamente todo, desde la concepción de la idea hasta la publicación final. Puedo decidir sobre el diseño de la portada, el formato del libro y también los plazos, puedo tener mis propios tiempos. El hecho consiste en escribir y autopublicarse. Sin contrato editorial. Todo a pulmón. De hecho, tengo mi propio canal de venta y allí encuentran todos los libros publicados”.
“Lo más importante es tal vez la libertad para mantener la integridad de mis historias, contarlas como yo las quiera contar, sin tener que adaptarlas a las demandas del mercado o las expectativas de una editorial. Eso me permite ser fiel a mi voz. Es un camino desafiante pero con recompensas. La libertad no tiene precio”, asegura, señalando que también valora esa cercanía con los lectores. “Ellos no solo son quienes consumen mis historias, sino que también forman parte de mi proceso creativo a través de sus comentarios, criticas, sugerencias. Esta interacción constante me mantiene motivada”, afirma.
Al consultarle sobre qué consejos le daría a aquellas escritoras que no se animan a lanzarse por sus propios medios. Agustina nos señala que: “el verdadero peligro no es fracasar, si no no intentarlo”. “Les aconsejaría primero, que se animen, segundo, que sigan sus propias reglas. No hay un camino correcto y uno incorrecto. No hay nada más que nuestras ganas de hacer algo y de cuánto lugar le damos a nuestro autoboicot. Si se logra superar eso, las posibilidades son infinitas”, sostiene.
Luego agregó: “Si hay una historia queriendo salir de adentro, que dejen que salga, que no paren y que crean en ellas mismas. No existe un hada madrina que viene a tocarte con la varita mágica y de repente “lo logras”. Eso no pasa. Messi no es el mejor del mundo por quejarse desde su sillón lo difícil que es todo. Se esforzó durante toda su vida, desde chiquito, entrenando sin parar, yéndose a vivir a otro país, con miedo e incertidumbre, sin garantías. No digo que todos vayamos a ser Messi, pero si uno no cree en sí mismo, no se esfuerza, no lo da todo, es posible que no pase nada. A la escritora que no se anima: animate, ya sabes a dónde te lleva la duda. No hay costo con probar, solo ganancia”.
La Trilogía del Origen: un thriller en la Patagonia que busca desafiar al lector
“Combinar suspenso y temas contemporáneos es mi forma de crear una narrativa que no solo atrape, sino que también desafie y haga pensar. En ‘El Origen de las Flores’ y en ‘El Origen de las Piedras’, primeros tomos de mi trilogía, el lugar que les toca a las mujeres puede parecer chocante y exagerado, pero para mí no lo es. Creo que mucho de lo que viven estas mujeres, también lo hacemos las de la vida real. Por supuesto que sin todas las cosas oscuras que les suceden (o sí), lo que creo es que compartimos muchos de los pensamientos que aparecen en nuestras cabezas desde ambos lados, la ficción y la realidad”, explica Agustina sobre su obra.
“Veo a mi alrededor cómo en el universo femenino hay abundancia de secretos, de miedos, de represión, de sometimiento, de “deber ser”, de “cumplir”, de injusticia, de lucha, de fuego, de ganas de gritar. Lo mismo pasa con mis personajes. No somos tan distintas. Contar lo que les sucede desde el suspenso, es un enfoque que me ayuda a hablar de las cosas que me interesan y de hacerlo de tal manera que sea interesante y atrapante, por lo menos para mí, que me voy sorprendiendo a medida que avanzo”, agrega.
Centrandonos un poco más en las historias de Restucci, la autora nos contó más a fondo sobre sus últimas tres novelas de la Saga del Origen.
- La primera parte, ‘El Origen de las Flores’, ambientaba en Argentina en la actualidad, trata acerca de la búsqueda de respuestas por parte de su protagonista, Cala, acerca del crimen acontecido una noche de campamento en la que sus tres mejores amigas (también con nombre de flores), desaparecen. Para ello hace un viaje al pueblo de su infancia, en la Patagonia, donde desentierra un secreto escondido en lo profundo de su cuerpo, secreto del que pactaron nunca hablar. Cala en su búsqueda, se va también, descubriendo a ella misma. En algún momento de su niñez, mientras compartían la educación en un colegio pupilo de la zona, un culto antiguo, con membresía de muchos adultos de la zona, las utilizaron.
- La segunda entrega, ‘El Origen de las Piedras’, es la precuela. En esta entrega se entienden las razones por las cuales todo lo acontecido en El Origen de las Flores fue posible. Está ambientada a principios del SXX, donde con la llegada de muchos inmigrantes europeos a la Patagonia argentina en pos de poblarla, el gobierno hizo la vista gorda en varias áreas, incluyendo el destino de un grupo de huérfanas, entregadas a una comunidad galesa recién establecida. Una de éstas huérfanas es Jade, futura madre de Cala, quien cae en mando de lo que fue el germen del culto que, más tarde, se expandió descontroladamente por la zona. Esta logia, adora a la naturaleza y profesa como objetivo mejorarla y la raza humana cae dentro de lo que consideran “mejorable”. Las huérfanas se convierten en perfectos conejos de indias. Jade, sin embargo, se descubre como guerrera y da su lucha, fuego que después, heredó su hija.
- La última entrega, la que estoy escribiendo, está ambientada en un futuro cercano y su protagonista es la nieta de Jade, hija de Cala y cierra el ciclo de redención de las tres. Y de muchas mujeres también. Va a estar a la venta en 2025.
Sin embargo, ¿cuál es el secreto detrás de los mundos y personajes que Agustina crea? “Mi secreto, si es que tengo uno, es que nunca paro. No me freno, no me autocensuro, no dudo. Puede pasar en el proceso creativo de un escritor o de cualquier artista o de cualquier área, que nos invadan preguntas como ¿qué estoy haciendo? ¿Para qué? ¿A quién le importa? ¿Para qué lo hago? ¿Es todo un disparate? ¿A qué estoy jugando?. Pienso que esas preguntas son inevitables, el tema está en cómo se responden y creo que ese es mi secreto: No las escucho. Están ahí, pero las ignoro. Sigo. Avanzo”.
“En general me pasa cuando llega el momento de mostrar lo que hice. Pero lo bueno es que lo veo, me doy cuenta de lo que me está pasando y lo freno a tiempo. No es fácil exponerse. Por lo menos no lo es para mí, pero ya aprendí a manejarlo”, sentencia.
Lo que se viene para Agustina Restucci
Sobre su futuro en la escritura, la autora nos hace un pequeño spoiler de lo que se viene. “Mis próximos pasos a seguir son darle los últimos toques a la tercera y última entrega de la Trilogía del Origen. A modo de adelanto puedo decir que se trata de una historia en la que la ciencia y el misticismo se entrelazan de manera tal que el lector es testigo de lo que sucede una vez que lo lógico se encuentra con lo inexplicable. Su lectura sin dudas conlleva un desafío a todo lo que creemos saber. Yo creo que para fin de este año o principios de 2025 ya va a estar en el mercado”.
Pero antes, Restucci nos cuenta que tiene otro proyecto entre manos que la muy entusiasmada. “Hace tiempo que tengo ganas de hacerlo y no encontraba el coraje. Se trata de un libro de cuentos, con un estilo fantástico y algo de realismo mágico que tengo pensado sacar en pocos meses”. Sobre esta nueva faceta, la autora nos adelanta: “En este libro veo la posibilidad de que el lector derribe paredes, salga de los límites establecidos como posibles y permita ‘delirar’. Me parece que es un buen ejercicio, salir de la caja, de lo esperado. No puedo adelantar mucho, va a salir antes de fin de año, es un conjunto de cuentos titulado ‘Cuentos Anormales’”.
Sobre lo que ha significado este proyecto para ella, Rstucci es muy franca: “Es un desafío porque salgo de mi zona de confort que son las novelas y me meto en uno muy distinto que es el de cuentos. Pero tengo ganas de hacerlo. Hay un frase de Cortázar que me gusta: “la novela siempre gana por puntos, mientras que el cuento debe ganar por nocaut”. Esta frase resume un poco lo que siento con este proyecto. Pero me gustan los desafíos así que allá voy”.