A sus 26 años, Oriana Vidal (@orianavidal.ph) ha logrado destacarse como una de las fotógrafas más prometedoras en el competitivo mundo de la moda, tanto en Argentina como en el ámbito internacional. Con una trayectoria que combina talento, dedicación y una visión única, ha trabajado con reconocidas figuras como Camila Homs, Milett, Luana Barron, y Victoria Ruiz, entre otras. Sin embargo, su camino no fue sencillo, y la historia de Oriana es un testimonio de perseverancia y ejemplo para quienes buscan seguir el camino de la fotografía.
Oriana recuerda con claridad el momento en que nació su amor por la fotografía. “Tenía 11 años cuando me compraron mi primera cámara en un viaje a Miami. Empecé a sacar fotos y a grabar videos, y desde entonces no paré”, comenta. Aunque en su adolescencia siguió explorando la fotografía de manera autodidacta, fue a los 22 cuando decidió dar un paso más serio hacia su vocación. “Compré una cámara, tomé clases de fotografía y edición, y empecé a hacerlo de manera profesional”, señala.
Su fuente de inspiración fue Annie Leibovitz, una fotógrafa que Oriana admira profundamente. “Siempre me fascinó su capacidad para contar historias a través de las imágenes. Su uso de los colores, la composición y las luces es único. Para mí, poder transmitir emociones con una foto es lo que define a un buen fotógrafo”.
El desafío de abrirse camino en la industria de la moda
Como muchos en la industria del entretenimiento, Oriana enfrentó grandes desafíos al principio de su carrera. Uno de los más importantes fue la falta de contactos en el mundo de la moda y la fotografía profesional. “No conocía a nadie en la industria. Conseguir esos primeros clientes y hacer networking fue lo más difícil”, confiesa. Sin embargo, supo que la clave estaba en no rendirse y en seguir persiguiendo oportunidades, aunque estas parecieran inalcanzables.
“Al principio, da miedo mandar mensajes o propuestas, pero es necesario para darte a conocer. Es importante empezar con lo que se tiene a mano, sin esperar el equipo perfecto ni las mejores condiciones”. Oriana trabajó arduamente en su portafolio, construyendo su estilo propio y diferenciándose en un mercado competitivo. “Nadie tiene la misma visión que la tuya, y eso es lo que te hace destacar”, asegura.
Consejos para los nuevos talentos de la fotografía de moda
Para aquellos que están comenzando en el mundo de la fotografía de moda, Oriana ofrece consejos claros: “No tengan miedo de empezar con lo que tengan. Las conexiones se construyen poco a poco, y siempre hay que seguir insistiendo hasta que alguien te responda”.
También enfatiza la importancia de la edición en el proceso fotográfico, una habilidad que, según ella, es fundamental para transformar una imagen y darle un carácter único.
Además, recomienda no subestimar el poder de colaborar con otros fotógrafos y marcas desde el inicio. “Trabajar como asistente de fotógrafos experimentados es una excelente manera de aprender sobre el terreno”, sugiere.
El esfuerzo y la creatividad de Oriana la han llevado a colaborar con destacadas figuras del entretenimiento y las redes sociales, como la actual participante de Bakie Off, Camila Homs. “Cada experiencia me ha permitido crecer y expandir mi audiencia”, señala con orgullo. En cada proyecto, Vidal busca algo más que una simple imagen: busca contar una historia, transmitir una emoción y conectar con su audiencia.
A través de su lente, Oriana ha logrado no solo capturar la esencia de la moda, sino también de las personas que la llevan, destacándose por su capacidad de inmortalizar momentos con una estética distintiva y personal.
Con una carrera en ascenso y un enfoque claro en seguir perfeccionando su técnica, Oriana Vidal continúa posicionándose como una referente en la fotografía de moda. Mientras mira hacia el futuro, está segura de que su viaje apenas comienza, y sigue entusiasmada por las oportunidades que están por venir. Para ella, la fotografía no solo es una profesión, sino una forma de vida que le permite expresar su creatividad y conectarse con el mundo.