Reciclar lo que ya no se usa es una de las actividades más importantes de los hogares para preservar el ambiente y colaborar con no tirar los residuos que contaminan el aire o son difíciles de degradar. Los frascos de vidrio están presentes en todos los hogares y se acumulan en cantidad, se puede aprovechar y crear manualidades útiles.
Recipientes de mermeladas, yogures, mieles u otros, son algunos de los frascos de vidrios que hay en la cocina vacíos y se juntan en cantidades cuando se terminan de consumir. Si bien es más común que le den otro uso por su estructura estética, muchas veces terminan en la basura.
Lo más tradicional es que se use como especiero o florero. Sin embargo, se puede aprovechar para otras cosas, solo se necesita tiempo y ganas de crear nuevos productos ideales para decorar o que sirva de contenedor para guardar diferentes elementos de la casa.
Tres ideas para reciclar los frascos de vidrio en casa
- Los frascos de vidrio son ideales para germinar semillas de aromatizantes o hierbas para la cocina. Para eso se necesitan:
- Frascos de vidrio
- Tierra fértil o compost
- Semillas de hierbas aromáticas
- Piedritas o carbón vegetal para el drenaje
En el fondo del frasco colocar las piedritas o carbón para evitar que se acumule agua. Luego rellenar con tierra dejando unos centímetros libres desde el borde.
Según señale las indicaciones de cada semilla, sembrar en la tierra. Humedecer con agua y colocar en un lugar con luz.

- Otra idea es armar velas aromáticas con el recipiente. Para eso se necesitan:
- Frascos de vidrio limpios
- Cera de soja, de abeja o parafina
- Mechas de algodón
- Esencias aromáticas
- Palillo o broche para sostener la mecha
- Olla para baño maría
Derretir la cera a baño maría en una olla. Colocar la mecha en el centro del frasco y usar un soporte para que quede fija.
Cuando se derrite la cera, colocar gotas de esencia y revolver. Luego colocar en el frasco sin mover la mecha. Dejar enfriar.

- Otra opción es hacer un centro de mesa con vela y decorar el living o el comedor. Se necesita:
- Frascos de vidrios
- Puntilla de algodón
- Pegamento
- Tela arpillera
- Un cinto viejo
La puntilla se puede teñir con té o café. Cortar en tiras del largo del frasco y colocar con pegamento en vertical a una medida x distante. Luego hacer lo mismo con dos tiras horizontales intercaladas con las verticales.
Pegar los sobrantes en la base del frasco. Cortar un redondo de tela arpillera y pegar por encima.
Por último, pegar un cinturón en la parte de arriba donde va la tapa. Colocar una vela adentro.
