En una entrevista exclusiva para Vía País, Julieta Poggio, la exparticipante de Gran Hermano, habló sobre cómo le cambió la vida su estadía en la casa más famosa del país y cuáles son los nuevos proyectos que tiene en agenda.
La vida de Julieta Poggio después de Gran Hermano
Julieta Poggio fue una de las participantes más querida de la décima edición de Gran Hermano, tanto fue así que fue finalista y completó el certamen con el tercer puesto.
Los casi cinco meses que permaneció dentro de la casa más famosa, la ayudaron a mostrar su talento como bailarina, modelo y actriz, y también a cumplir sus sueños, ya que desde que salió no para de realizar trabajos muy soñados para ella.
—Si pudieras elegir tu próximo paso en tu carrera, ¿Cuál sería?
— Mi sueño ahora como actriz, mi gran gran sueño así soñando a lo grande sería estar en alguna serie como Elite o irme a España y probar suerte allá.
—¿Cuál fue el cambio más grande en tu vida después de Gran Hermano?
—Y el cambio más grande después de la casa que noté en mi vida es la visibilidad que me dio porque yo antes de la casa también actuaba, también bailaba, pero para los artistas quizás es muy difícil hacernos ver. Muchos luchamos y trabajamos hasta que se nos da, entonces yo creo que eso, más que nada la visibilidad que me dio para ahora poder estar cumpliendo mis sueños.
—¿Qué es lo que menos y lo que más extrañas de la casa?
—Y lo que más extraño de la casa es la paz mental que manejaba, lo relajada que estaba, cómo podía dormir la siesta, cosa que ahora no, que estoy a mil y quiero parar un minuto de hacer cosas, por suerte y gracias a Dios. Y lo que menos extraño... es compartir el baño con todos.
—¿Cómo manejas la fama repentina después de la salida de la casa?
—El reconocimiento lo estoy viviendo como algo muy lindo porque es hermoso por fin conocer a las personas que estuvieron del otro lado cinco meses apoyándome en cada placa para que llegue a la final. Y es hermoso conocerlos, recibir todo el amor que me dan, que me digan a la cara, yo te voté, yo quería que ganes. Así que es algo hermoso, que estoy totalmente agradecida. Y lo único que me queda es devolver todo el amor que ellos me dan.
—¿Te consideras una influencer de moda? ¿Ves chicas que se inspiren en tus looks?
—No me considero tanto influencer de moda, lo que sí me gusta mucho de la moda es como que a la hora de elegir un outfit no me da lo mismo porque siento que es quizás lo que me identifica y cómo la gente me va a ver todo el día. Creo que no es una tontería elegir la ropa que usamos cada día, porque sería muy aburrido que todos nos vistiéramos iguales. Y pienso que eso de la inspiración lo veo mucho en las nenas chiquitas, que me mata de amor, que quizás las mamás me dicen, ‘usa las hebillitas como vos o usa las polleritas como vos’. Y nada, me mata, me mata el amor, me da mucha ternura y me emociona un montón.
— De lo que hoy todos hablan es del video de Tomás Holder ¿Lo viste?
— Una amiga me mandó el link y tuve la desafortunada suerte de abrirlo en el cumpleaños de la cena familiar de mi hermana, o sea, imagínate lo que fue, muy desafortunado el momento, pero bueno, qué sé yo, es como que yo al verlo a Holder con la respuesta de aquel día no lo veo tan preocupado, así que... No sé cómo se habrá filtrado, pero de verdad no creo que haya sido por su parte.
La participación de Julieta Poggio en Fuerza Bruta
La joven de 21 años comenzó su carrera como artista desde que era una niña, como actriz infantil y de adolescente en varias obras de teatro. Pero, sin dudas, Gran Hermano impulsó su fama y ya cuenta con 2.4 millones de seguidores, y a punto de estrenar y presentar su talento en el nuevo show de Fuerza Bruta, “AVEN, el show más feliz del mundo”.
— ¿Cómo fue el proceso de integrarte a Fuerza Bruta?
— El proceso de integrarme la verdad que fue muy fácil porque los chicos, además de ser talentosísimos e increíbles artistas, son literalmente un amor. Es como difícil encontrar adentro de un elenco tanta buena onda y tanta buena vibra, que todos te tienen la mejor, te alienten, te hagan sentir cómoda para que cada vez me salga mejor. Entonces eso me ayudó un montón para sentirme cómoda, para soltarme y para integrarme. La verdad que son todos muy, muy buena onda y muy profesionales.
— ¿Qué fue lo más difícil a lo que te enfrentaste en los ensayos?
- Lo más difícil de mi cuadro que es el de la cinta es que en sí la coreografía no me parece tan compleja porque obviamente yo estudié muchos años danza y bueno si bien es rápida y necesita de mucha energía lo más difícil es hacerlo sobre la cinta porque es como que no solo es bailar, sino que es todo el tiempo avanzar y estar muy atento a eso para no caerte y para darle lugar también a tus compañeros, es estar muy consciente del espacio, es decir que es muy reducido y está en constante movimiento y eso fue quizás un poquito de las cosas que más me costó. Y también tuve que experimentar mucho lo que es expresión corporal, expresión con la cara. Como este show no tiene texto, hay que transmitir mucho con el cuerpo y eso también lo fui desarrollando de ensayo en ensayo.
—¿Por qué deberían ver la obra y qué pueden esperar los que asistan?
—Este show es imperdible porque es una experiencia única que tiene un montón de mensajes a libre interpretación, eso es lo más lindo que transmite un montón de emociones y tiene un elenco increíble, unos artistas que la rompen. Es en la sala sin piso de GEBA lo que significa que no hay un escenario fijo, sino que todo el tiempo suceden cosas alrededor, en todos lados hay arneses volando, hay agua, hay viento, hay pantallas, hay DJ, la van a pasar bomba, es para toda la familia. A los chiquitos les van a encantar, a la gente grande también. Y estoy segura de que van a querer volver.