Pese a ser una de las participantes más polémicas de la nueva edición de Gran Hermano, el último domingo Jenifer Lauría se convirtió en la tercera eliminada. Ya fuera de la casa, estuvo en LAM en donde volvió a hablar de su exmarido y padre de su hija, Ricardo Centurión. Y no solo de él, sino también de su familia.
Jenifer reconoció que Centurión es “un padre ausente”. También dijo que “no le hace bien hablar” de todo lo vivido tanto con su ex como con su familia. “Sufrí mucho con él y su familia. Violencia psicológica. Ricardo sabe cómo soy, como mamá, como mujer y como pareja. La familia de él siempre me salió a matar, incluso antes de que estuviera embarazada”, dijo.
El panelista Pepe Ochoa comentó que una de las cosas que dicen las hermanas del exjugador es que al principio del embarazo hubo mensajes que dejaban expuestas las especulaciones de Jenifer sobre quién sería el padre de su hija. “Que no sabías si era de Ricardo o tu ex”, le dijo.
“Me genera bronca porque inventan cosas. Han dicho que yo, estando embarazada, trabajaba de prostituta en el departamento en que vivía con él”, agregó Jenifer acerca de las acusaciones que la familia del futbolista habría hecho sobre su persona.
“Nunca dejé de trabajar”
Ángel de Brito le preguntó cuál era la intención de la familia con las actitudes para con ellas. “No sé qué querían. Nunca me dijeron nada en la cara”, señaló.
También repitió que decían que su hija “no era hija de él”. “Lo único que me dio fue una casa y una camioneta. Yo conservé mi trabajo, nunca dejé de trabajar. Hace diez años que trabajo con los Moyano”, comentó.
Jenifer dijo que vivió con Centurión algo más de tres años y que al principio “fue una relación re linda”. “Después del tercer mes de embarazo arrancaron los problemas”, dijo y admitió que “mil veces trató de ayudarlo”.
“Él nunca me defendió de su familia, solo me decía que a su ex le hacían lo mismo. Se deja manipular por ellas”, aseguró.
Sobre los dichos de la familia acerca de que el jugador “la sacó de la calle”, enfatizó: “Yo no estaba en la calle, tenía un departamento, mi auto, viajé a conocer otros país. Él mantenía a su familia, porque la palabra laburar no la conocen”.