A sus 48 años, Dolores Barreiro decidió darle un radical giro a su vida. La exmodelo argentina dejó atrás su país natal y se instaló en Inglaterra, específicamente en el pintoresco pueblo de Hindhead, en Surrey. Esta mudanza no solo significó un cambio de residencia, sino también un nuevo capítulo en su vida personal y familiar.
El nuevo comienzo de Dolores Barreiro en Europa
Dolores se mudó a Europa acompañada por su novio, el polista Santiago Gómez Romero, y dos de sus hijos más pequeños, Suri e Indra. La exmodelo es madre de cinco hijos fruto de su relación con su exesposo Matías Camisani, pero en esta ocasión, Valentino, Salvador y Milo se quedaron en Buenos Aires para continuar con sus estudios y sus incipientes carreras en el mundo del modelaje.
La decisión de mudarse a Inglaterra no fue tomada a la ligera. Según Dolores, la vida en Hindhead les dio una oportunidad única de experimentar un ritmo de vida diferente y disfrutar de la naturaleza y la tranquilidad que ofrece el lugar.
La nueva vida de Dolores Barreiro rodeada de naturaleza
Desde su llegada a Hindhead, Dolores compartió a través de su cuenta de Instagram cómo es su día a día en este nuevo entorno. “Me encanta caminar por los valles cubiertos de niebla, comer al aire libre, leer en pareja y jugar con los chicos tanto como pueda”, comentó en una de sus publicaciones.
La exmodelo encontró en este pequeño pueblo inglés un refugio de paz y serenidad. Las actividades al aire libre, el contacto con la naturaleza y la posibilidad de pasar tiempo de calidad con su familia fueron fundamentales en su adaptación a esta nueva vida.
Aunque se encuentra disfrutando de su vida en Inglaterra, Dolores no olvida a sus hijos mayores, quienes decidieron quedarse en Buenos Aires. “Mis hijos mayores están muy comprometidos con sus carreras y les encanta Buenos Aires”, explicó, refiriéndose a Valentino, Salvador y Milo, quienes están inmersos en sus estudios y proyectos personales.
Dolores Barreiro ve su nueva vida como un cambio positivo
Dolores Barreiro encontró en Inglaterra un lugar donde la calidad de vida mejoró significativamente. “Esta experiencia en Inglaterra es una aventura familiar que nos ha unido más que nunca. Vivir en Hindhead ha sido un cambio refrescante. Aquí encuentro paz y un ritmo de vida que me permite estar más presente para mis hijos y para mí misma”, expresó, reflejando la felicidad y satisfacción que siente en esta nueva etapa.
Con esta mudanza, Dolores no solo encontró un nuevo hogar, sino también una oportunidad para reconectar con su familia y consigo misma, en un entorno que les brinda tranquilidad y un estilo de vida más relajado.