Gran Hermano 2025 es uno de los formatos más populares de la Argentina. El hecho de formar parte de la familia Telefe, los participantes tienen la oportunidad de incursionar diferentes rubros profesionales, que van desde el modelaje hasta panelista en un medio de comunicación.
"La verdad es que estoy muy contenta, estar cumpliendo todo lo que siempre soñé. Mi objetivo para entrar a la casa era por la experiencia, obvio, pero también quizás para dar a conocer un poco mi trabajo que fui haciendo desde chica, estudiando, formándome y que ahora se me estén abriendo tantas puertas es un sueño increíble", aseveró Julieta Poggio en una entrevista para Teleshow sobre lo que ha logrado gracias al reality.
Cada hermanito coordina qué hace con el reconocimiento recibido por el programa. Es por ello que la nueva jugada de Brian, exparticipante de Gran Hermano 2025, fuera de la casa generó sumo debate en las redes sociales.
La nueva vida de Brian tras Gran Hermano 2025
Brian fue uno de los hermanitos más competitivos de la edición. El uso estratégico de los vivos y la forma de exponer a sus compañeros lo realzó por encima de sus compañeros. Sin embargo, esto no fue suficiente a la hora de su mano a mano con Luz.
Al salir de la competencia, tomó una decisión importante respecto a su carrera: regresó a la venta de golosinas en el tren San Martín. “Hola gente, ¿cómo andan? Dicen que uno fue donde fue feliz, aquí con los pibes del tren“, aseveró el exhermanito mientras repetía en el tren: “¿Cómo andan? ¿Todo bien? Cuatro por $1000 los alfajores, están muy ricos, esta es la promo, la oferta”.
Durante su paso por el tren, compartió con sus amigos más cercanos del rubro. Incluso, ayudó a uno de ellos al intentar vender algunos de sus alfajores. “Dándole una mano a mi amigo El Pachy. Cómo extrañaba el tren”, aseveró el vendedor en sus redes sociales.
La historia de Brian de Gran Hermano 2025
Finalmente, Brian relató en la revista GENTE cómo llegó a la venta de golosinas en el tren. "Mi papá era vendedor ambulante, se separó de mi mamá y yo quedé con ella en una casa que era antigua… Estaba hecha con barro. No nos faltaba para comer, pero llegábamos con lo justo y le dije a mi papá: “Quiero hacer algo para ayudar. Quiero ir al tren a vender”, destacó el padre de familia.
