¿Por qué los perros no deben comer chocolate?

Este alimento suele encantarle a las mascotas, pero suele ser un veneno para ellos, aunque la gravedad depende del tamaño del animal, la cantidad ingerida y el tipo de cacao.

¿Por qué los perros no deben comer chocolate?
El chocolate es nocivo para las mascotas

Es común que ante el pedido de nuestro perro de alguna recompensa recurramos a ofrecerle alguna golosina, pero es importante saber que nunca hay que darle chocolate, ya que puede resultar literalmente veneno para ellos.

En ninguna de sus formas las mascotas deben comer chocolate (wikipedia)
En ninguna de sus formas las mascotas deben comer chocolate (wikipedia)

El componente del chocolate que es tóxico para los perros se denomina teobromina y mientras que los humanos la metabolizan fácilmente, los perros lo hacen mucho más lentamente, lo que lleva a que se acumule en su organismo hasta llegar a niveles tóxicos.

Pero también hay que tener en cuenta el tamaño del animal, ya que un perro grande puede comer porciones más grandes de chocolate que un perro pequeño, antes de comenzar a manifestar efectos adversos. También hay que saber que los diferentes tipos de chocolate tienen distintos niveles de teobromina. El cacao, el chocolate para cocinar y el cacao negro contienen los niveles más altos, mientras que el chocolate con leche y el blanco tienen los más bajos.

Perro cuidados (Twitter/@humorandanimals)
Perro cuidados (Twitter/@humorandanimals)

Una pequeña cantidad de chocolate probablemente sólo le genere un malestar estomacal, con diarrea y hasta vómitos. Cuando se trata de cantidades mayores tendrán efectos más graves. En dosis elevadas, la teobromina puede causar temblores musculares, convulsiones, un latido cardíaco irregular, hemorragias internas o un ataque al corazón.

En una fase inicial del envenenamiento por teobromina normalmente se manifiesta una hiperactividad severa. El alto nivel de teobromina que tiene el chocolate negro hace que, por ejemplo, se precisen sólo 25 gramos para envenenar a un perro de 20 kilos.

El tratamiento habitual del envenenamiento por teobromina consiste en provocar un vómito antes de las dos horas posteriores a la ingesta. Y lo más importante, llamar con urgencia al veterinario ya que el tiempo juega en contra en estos casos.