A días de la llegada de Salvador Uriel, Victoria Xipolitakis y Javier Naselli celebraron su Baby Shower con una fiesta a la que no le faltó nada. La mediática salió de un paquete de regalo gigante y dio comienzo a una fiesta llena de detalles ostentosos, momentos emotivos y episodios hilarantes.
El evento se celebró en la tarde del miércoles en el Salón García Lorca del Hotel Meliá, en Retiro. La ambientación del lugar estuvo pensada en cada detalle, con un decorado en las tonalidades celeste pastel y lujosos adornos en oro.
A las 19 horas, un regalo gigante entró al salón y de allí salió la protagonista, que fue ovacionada por sus invitados. Más allá de la tradición, en el Baby Shower estuvo presente el papá de Salvador y varios amigos de la pareja.
El atuendo elegido por Xipolitakis fue especialmente traído desde Ucrania. Se trata de un vestido realizado en tul celeste con palilletes en tonalidades oro, que combinó con un cinturón oro y accesorios al tono. En su cabello lució una tiara y algunas ondas.
De la celebración participaron 50 personas, entre las que se destacaron Moria Casán, fiel amiga de Vicky, y Stefi Xipolitakis, su hermana con la que había estado varios meses peleada.
Además de recibir muchos regalos, bailar y comer mucho, la mediática se emocionó con el poema que le escribió un amigo y la canción de cuna que le cantó su hermana junto a su mamá, Helena. Cabe recordar que hasta hace pocos meses Vicky estaba peleada con su familia, que no asistió a su casamiento y que se enteró de su embarazo por la televisión.
Lo más excéntrico de la noche fue una piñata que contenía billetes de un dólar con el objetivo de "dar suerte a los invitados". Al explotarla, los participantes terminaron arrastrándose por el suelo intentando recoger la mayor cantidad de billetes verdes que podían.
De souvenir los invitados se llevaron fueron unas toallitas personalizadas acompañadas de un osito de madera con el nombre del niño por nacer. Por otro lado también decidieron regalar a los invitados un set de dulces argentinos, para aquellos invitados internacionales.
Al finalizar el evento, los futuros padres cortaron la torta y todos los invitados encendieron estrellitas navideñas. Finalmente, se hizo una suelta de globos blancos.
Hace días, Vicky Xipolitakis había mostrado que, al igual que ella, Salvador ya es hincha de Boca desde la panza. Si el equipo xeneize consigue la Copa Libertadores este fin de semana por ahí ya decide salir a festejar...
