La defensa de un padre a su hijo que sufrió "bullying" por pintarse las uñas

"Él tiene cinco años y hoy aprendió cuán mala y dañina es la masculinidad tóxica", escribió en una serie de tuits.

Aaron Gouveia, un padre de Massachusetts, Estados Unidos, se horrorizó al descubrir que su hijo de cinco años estaba sufriendo bullying en el jardín por pintarse las uñas. Y no solo se dedicó a apoyar a su hijo, sino que también uso Twitter para crear una campaña contra la "masculinidad tóxica".

Con la cuenta @DaddyFiles, el nombre de su blog de padres, Gouveia comenzó una serie de tuits con una foto de su hijo con un pez y las palabras: "Este es mi hijo, Sam. Él tiene cinco y hoy aprendió cuán mala y dañina es la #ToxicMasculinity. Mi medidor de rabia está aumentando ahora, así que discúlpeme si esto es un poco crudo, pero hay algunas cosas que quiero decir acerca de las estúpidas normas de género".

Continuó: "Sam es mi hijo mediano y él es un terror. Un 'chico chico' como dirían tantos (no yo). Es rudo, siempre está sucio, le encantan los camiones, juega deportes. Pero también le encantan muchas cosas 'femeninas'".

También contó que Sam tiene una colección de carteras porque le gusta llevar cosas de un lugar a otro y que le gusta pintarse las uñas porque cree que "se ven hermosas".

"Así que esta mañana se fue con las uñas pintadas de rojo al jardín, porque no tiene incorporada la idea de que pintarse las uñas es cosa de chicas ni razón alguna para pensar que alguien podría tener un problema con las uñas hermosas", agregó.

Gouveia, de 39 años, quien trabaja como relacionista público y vive con su esposa Martha, de 40 años, y sus tres hijos, dijo que la respuesta que recibieron sus tuits lo dejó impresionado. "Estoy increíblemente conmovido por la cantidad de personas que nos han escrito", le reveló a The Guardian. "[El objetivo es] normalizar esto y simplemente cambiar un puñado de mentes". Sam, por su parte, dijo que los tuits de apoyo le habían "animado" y le habían dado confianza para seguir decorando sus uñas con orgullo.

Por último,, Gouveia remarcó que no culpa a los niños que acosaron a su hijo: "A esta edad, se sabe, por lo general, esto proviene de los padres". Pero elogió el jardín de infantes, que que se tomó la situación "muy en serio" y que aprovechó esta oportunidad para hablar sobre la aceptación con sus alumnos.