Un estudio publicado en Journal of Feline Medicine and Surgery (JFMS), asegura que la música es clave para tranquilizar a los gatos en situaciones potencialmente estresantes, como por ejemplo las visitas al veterinario.
Para este estudio se analizaron los efectos de diferentes estilos musicales en 20 gatos y se concluyó que, al igual que como ocurre con los humanos, los sonidos producen una mejor función motora y cognitiva en los pacientes.
Según el informe, los felinos (incluso aquellos que se encuentran bajo anestesia general) responden fisiológicamente a la música. Además, parecen estar mucho más relajados cuando se reproduce música clásica, en comparación con al pop o al heavy metal.
Los especialistas aseguran que existe una música determinada que es específica para gatos. Esto se basa en que, para el humano, los sonidos más agradables son aquellos que tienen un ritmo similar al pulso humano en reposo y que contienen un rango vocal humano, por lo que se buscaron frecuencias similares al rango vocal felino, que es dos octavas más alto que para los humanos.