Esta es la historia de Lito García Muñoz, un joven español que quiso encontrar la mejor forma de llevar a su perro Kiyo junto a él, y decidió tatuárselo.
Para eso, recurrió a Scone Lopez, uno de los artistas de tatuajes realistas más destacados de Madrid.
El resultado, cuando fue compartido en las redes, asombró a todos: el parecido entre Kiyo y su tattoo es asombroso. El propio Lito le agradeció al tatuador con un mensaje: "Lo mejor que llevo en la piel", escribió.
Rápidamente, el arte de llenó de elogios, tanto para el tatuador como para el adorable Kiyo.