El exitoso programa de cocina MasterChef llegó a su fin en otra temporada con la conducción de Wanda Nara y 16 participantes que supieron lucirse con sus platos. Pero solo Estefanía Herlein y Rodolfo Vera Calderón lograron llegar en la gran final para consagrarse como el mejor cocinero amateur de la Argentina.
El cierre del programa se llevó a cabo en dos ediciones, la primera parte se emitió este domingo a partir de las 22.30. Mientras que el lunes se confirmó que Rudy fue el ganador de esta temporada, quien podrá levantar el trofeo y la suma de 10.000.000 (diez millones) de pesos en premio. La decisión estuvo a cargo de los reconocidos chefs: Donato de Santis, Germán Martitegui y Damián Betular.
Los finalistas debieron preparar en 90 minutos un menú de tres pasos: entrada, plato principal y postre. Para ello tuvieron tiempo ilimitado en el “almacén” para tomar todos los ingredientes necesarios.
Además, en esta edición final regresaron todos los participantes que fueron parte de esta temporada junto a familiares y amigos de los dos protagonistas de la noche. En una gala a puro nervios y emoción, los finalistas lo dieron todo en las cocinas más famosas del país.
Las devoluciones del jurado
Después de 90 minutos de intensa competencia, Rudy y Estefi recibieron su último “manos arriba chef” de parte de Wanda y fueron premiados por un caluroso aplauso de sus amigos, familia, exparticipantes y todo el estudio que estalló de emoción.
Sin embargo, la deliberación del jurado se conoció en la emisión de este lunes a partir de las 23.00 cuando Martitegui, Betular y Donato revelarán al ganador.
Para sorprender al jurado, Estefanía Herlein eligió tres platos: de entrada, camarones servidos en hojas de endivia; de plato principal, salmón blanco marinado con lima hecho a las finas hierbas y un puré de arvejas con palta y verduras; y de postre, un key lime pie.
Rodolfo Vera Calderón optó por un menú mexicano: de entrada, una sopa fría de palta; de plato principal, chiles en nogada; de postre, tarta de titas.
“Se me pasó muy rápido el tiempo. Lo había ensayado, pero acá como que me perdía”, expresó Estefanía al terminar sus platos. Y Rudy sumó: “Yo quedé de cama. Acá es correr para acá, correr para allá. Hay que tener también mucha agilidad mental”.
Estefanía recibió buenas devoluciones del jurado en su entrada. “Un plato muy a tu estilo, es como una bocanada de verano”, opinó Martitegui, y Betular asintió: “Está muy bien ese balance de cítricos. Está muy logrado, me gusta”. Por su parte, Donato opinó: “Están crocantes, se sienten todos los ingredientes que pusiste. Muy buena entrada”.
En cuanto al primer plato de Rudy, los jurados apuntaron: “Sos como el royal de las sopas, las haces muy bien y hoy no fue la excepción”, dijo Betu. A su turno, Donato indicó que “hay mucho equilibrio” en su plato, y Germán disparó picante: “Hiciste todo lo que yo no hubiera hecho. Me sorprende muchísimo cuando alguien hace todo lo que yo le digo que no haga y le sale muy bien”.
Para el plato principal, la estrella del menú de cada uno, también recibió sus críticas. “Este plato habla de historia”, expresó el chef italiano. “Tiene una intensidad de sabores el relleno que no pude identificar nada. El resultado es un plato muy personal”, analizó Martitegui. Mientras que el pastelero señaló: “Me hubiera gustado más picante”.
Para Chef Tef, las observaciones también fueron positivas: “Espectacular el puré. Es muy coherente con el plato anterior”, destacó Germán. Betular analizó: “Hay una coherencia en el armado de este menú, felicitaciones”. Y De Santis valoró que “es muy audaz filetear un salmón en una final”.
El postre define todo
Después de devoluciones muy parejas, el jurado probó cada uno de los postres, el último paso del menú, que llevó a la decisión definitiva sobre el ganador de esta temporada. En lo que fue la devolución final del programa, la resolución del jurado fue buena para ambos participante.
“Solamente vos podés hacer esa cantidad de puntitos con una precisión casi japonesa”, elogió Damián a Estefanía. “Me gusta la masa un poquito más crocantita”, cuestionó Donato. Y Germán destacó la prolijidad del plato y la presentación.
“Si yo tuviera que pedirle a mi pastelero ‘haceme algo explosivo y sensual’ le pido esto”, soltó el chef italiano. “La mayor genialidad de esta tarta es haber dejado la crema sin azúcar, es una nube perfecta”, valoró Germán. Y Betular cerró: “Está muy rica la masa, está muy rica la crema. Es un cierre de un menú muy bien pensado”.