Con un lenguaje llano e irónico, pero instando a los presentes a tener una mirada ultranalítica sobre la realidad, el prestigioso cocinero español Ferran Adrià explicó este martes a los mexicanos su método "Sapiens" para ser innovador, del que se espera un libro a finales de 2019.
Durante su conferencia magistral "La creatividad se puede aprender" celebrada en el Centro Cultural España de la Ciudad de México, el chef llamó a ver el mundo como un sistema en el que todos los elementos están conectados y, cuanto más conocimiento se tiene de ellos, más fácil será generar nuevas formas de creación.
Para ejemplificarlo, agarró un vaso de agua y lo contempló unos segundos mirándolo fijamente. El público en silencio.
"Es transparente, pocos productos lo son, lo porto en una copa, un taco me lo puedo comer con la mano pero el agua no. El agua es H20. Es uno de los grandes problemas para la humanidad también, nos vamos a quedar sin agua", reflexionó de forma excéntrica el genio catalán.
Preguntas, preguntas y más preguntas es lo que se hace el fundador del reconocido restaurante El Bulli, el cual cerró en 2011.
Desde entonces, Adrià se ha dedicado fundamentalmente "a pensar" para poder innovar.
"Reflexionar sobre lo que yo hacía, lo que hacíamos en El Bulli, sobre la cocina. Nos encerramos y pensamos. Llevamos 8 años pensando y ahora empezamos a comprender un poquito lo que es la cocina, lo que es la creación, lo que hay a nuestro alrededor", contó.
Para Adrià, que podría definirse como un cocinero con alma de filósofo, el conocimiento es poder y cada vez parece estar más interesado en poner orden a todo ese conocimiento para manipularlo con la misma delicadeza con la que elabora sus platos preciosistas. No obstante, no niega la rebeldía como parte del proceso creativo.
"A mí me encanta la anarquía, si queréis nos ponemos todos en bañador ahora", retó al público. Tras las risas, matizó su teoría: "Me gusta ser anárquico cuando hay orden primero, si no todo es caos".
Otra de las obsesiones del chef es mirar hacia atrás, cuanto más atrás mejor, al origen de la humanidad o al momento en el que el hombre empieza a desarrollarse. Ese momento parece estar intrínsecamente ligado a la cocina, pasión y centro de la vida de Adrià.
Porque el ser humano, según la versión científica, nació cogiendo una piedra, convirtiéndola en herramienta, en cuchillo para corta la carne de los animales", explicó.
El método "Sapiens", que verá su explicación en formato libro a finales de año según dijo este martes el propio autor, consiste en acercase "a cualquier un objeto de estudio desde distintos aspectos para comprenderlo".
Estos son el aspecto léxico-semántico y conceptual, el aspecto clasificatorio, el aspecto comparativo, el aspecto histórico y el aspecto sistémico. Todos ellos dan claves a la persona para el campo en el que desea desarrollarse.
Si el objeto de estudio se observa desde un campo léxico-semántico se obtendrá una información distinta a la que da el aspecto comparativo, por ejemplo.
El léxico-semántico -cómo se nombra y define a las cosas que se están estudiando- "ayuda a identificar y replantearnos conceptos esenciales de la investigación". Asimismo, el aspecto comparativo permite poner en perspectiva la materia que se está estudiando. "Si quieres crear, tienes que comparar", aseguró.
También destacó el aspecto histórico, argumentando que "la historia nos permite ser libres y en relación con la innovación nos da la oportunidad de no copiar".
Pero más allá de la complejidad de este método, a lo largo de su charla, Adrià dejó distintos comentarios que reflejan su particular forma de ver el mundo. El español cree que la inteligencia artificial avanzará de forma desmesurada en los próximos años, en los cuales "los humanos dejaremos de ser los más inteligentes".
También cree que "Japón es otro planeta" sin el cual, por su herencia cultural, no se puede entender el mundo actual.
Adrià dejó entrever que cualquier persona puede estar creando constantemente incluso cuando elige con qué ingredientes se come un taco.
Sobre el talento, este "se puede entrenar", pero hay que saber que hay muchos tipos de talento: para gestionar, para crear, para vender. Cada profesión es un mundo y debe enfocarse de distintas maneras para ejercer la creatividad.
La felicidad, en cambio, es común a todos, pero "hay que comprender que son instantes", concluyó.