Las uñas son una parte fundamental del cuerpo pero algunos estudios demuestran que tienden a ser descuidadas. Más allá de los cuidados generales que se le brindan, entre los que están una alimentación saludable y el evitar comérselas, existen algunos hábitos nocivos que impactan de lleno en el bajo crecimiento de las mismas.
Según destacó la revista Para Tí, hay tres cosas que se deben evitar para tener las uñas fuertes y saludables: la exposición directa a productos químicos, la exfoliación abrasiva y un cuidado de las manos deficiente.
Como cada persona es un mundo, lo cierto es que dichos consejos deben estar acompañados siempre por un profesional de la salud que determine si el crecimiento deficiente tiene que ver con un bajo cuidado o con alguna patología existente.
El consejo principal para el cuidado de las uñas radica en algo que parece simple pero que muchas veces se olvida: utilizar guantes a la hora de lavar los platos, hacer trabajos de jardinería o limpiar el hogar.
La exposición de las uñas al agua, la tierra y los productos químicos que se utilizan en casa provocan debilitación y resecamiento. Por otro lado, los productos de higiene personal a utilizar deben ser jabones suaves que no contengan surfactantes en su fórmula.
Desde la pandemia se incentivó al lavado de manos frecuente, algo que siempre fue habitual pero que se acentuó con la emergencia sanitaria. Sin descuidar la propia salud, un excesivo contacto con el agua también provoca que las uñas se debiliten y se ablanden.
Otro gran problema para algunas personas es el mal hábito de morderse las uñas, una manía que muchos han adquirido simplemente por, nervios o ansiedad. Para ayudar a desterrarlo existen productos que se aplican sobre la uña y, al llevarlos a la boca, desencadenan un sabor amargo o a limón agrio, como es el caso de los esmaltes especiales.
Cómo cuidar las uñas de forma saludable y efectiva
El tip principal es usar pocos productos, pero de buena calidad. Así como existe la rutina de skincare, también se recomiendan algunos pasos para el cuidado de manos: exfoliante, crema de manos y aceites.
Como exfoliantes, se pueden usar los de tipo mecánico que usamos para el rostro, ya que suelen tener un grano más fino que los corporales y respetan la delicada piel de las manos, explicaron desde Para Tí. Este producto se aplica una vez a la semana mediante un suave masaje circular.
La hidratación es con una buena crema, evitando que la piel y las uñas se escamen. Esto puede repetirse cada vez que las manos entren en contacto con el agua, generando una capa protectora.
El tercer paso es aplicar un aceite para cutículas que suavizará las pieles que se endurecen alrededor de la uña, nutriendo su nacimiento para que crezcan sanas y fuertes.